Carlos Alcaraz Garfia está de vuelta. Después de participar en Wimbledon y Roland Garros, regresa a la actividad en un torneo ATP en Croacia, en el Plava Laguna Croatia Open Umag, que se disputa sobre tierra batida y que es de categoría 250. El ránking que ocupa en la actualidad -está en el puesto 73 esta semana- le permite ya entrar directamente en los cuadros finales de los torneos de esta categoría. De hecho, en Umag es el séptimo cabeza de serie de un ATP 250 donde también están inscritos Albert Ramos (41), Dusan Lajovic (43), Flip Kranjnovic (44) y el veterano francés Richard Gasquet (54), entre otros.

Con este torneo inicia otra parte muy importante de su temporada. El objetivo a principios de temporada marcado por su equipo técnico, que encabeza Juan Carlos Ferrero, era acabar esta temporada en el ‘top 50’. De momento se han cubierto todos los plazos, pero para llegar hasta ese escalón aún tiene que acelerar, puesto que le separan 346 puntos.

Después de aplazar la semana pasada su regreso a las pistas por un problema en el tobillo que le hizo perderse el torneo de Bastasd, hoy debutará ante el francés Lucas Pouille, que está en el puesto 103 del ránking mundial y que llegó a figurar en el ‘top 10’ en 2019, en Umag. El tenista de 27 años de edad presenta como mejor resultado esta temporada alcanzar la tercera ronda en el Masters 1.000 de Montecarlo, donde cayó derrotado ante Alejandro Davidovich, uno de los españoles que estarán en los Juegos Olímpicos de Tokio. En caso de superar el muciano este encuentro, tendrá que enfrentarse en segunda ronda al ganador del choque entre el italiano Salvatore Caruso y el eslovaco Andrej Martin. Por la misma parte del cuadro, ya en cuartos de final, aparece Felip Krajinovic, tercer cabeza de serie.

La semana que viene también tiene garantizada su presencia en otro ATP 250, el Generali Open que se jugará en Kitzbuhel (Austria). Ya en agosto llegará la gira americana previa el US Open. Alcaraz está inscrito en los Masters 1.000 de Toronto (9 al 15 de agosto) y Cincinnati (15 al 22 de agosto). El último grand slam de la temporada, en Nueva York, se jugará entre el 30 de agosto y el 12 de septiembre.

Asimismo, en el torneo de Umag donde debuta hoy se iba a vivir también un momento histórico, puesto que Juan Carlos Ferrero, ex número uno del mundo y entrenador de Carlos Alcaraz, iba a regresar a las pistas para jugar en dobles con su propio pupilo. Sin embargo, la ATP no ha permitido al alicantino regresar a la arcilla para un partido oficial porque no debe estar previamente inscrito durante seis meses en el programa de antidopaje. Esta situación solo ha retrasado la entrada en escena de Alcaraz en dobles, puesto que próximamente empezará también a competir en los mismos, donde también puede brillar por sus características.