José Manuel Ruiz Ibáñez y Rafael de La Hoz Tuells son dos jóvenes regatistas murcianos. A pesar de su juventud, han logrado numerosos éxitos en clases individuales juveniles, como Optimist y Laser Radial, que los han llevado a formar parte de la tripulación murciana de clase 49er en el Plan Nacional de Tecnificación Deportiva de la Real Federación Española de Vela, que prepara a los futuros regatistas olímpicos españoles para los Juegos Olímpicos de París 2024 en las instalaciones del CEAR de Santander.

Siendo niños, Rafael y José Manuel practicaron muchos deportes, como fútbol, tenis y baloncesto, pero, a diferencia de lo que suele ser habitual, ellos comenzaron a practicar otro deporte: la vela: «Iniciamos nuestra trayectoria en la vela gracias a la familia. El padre de Rafa tiene un velero y desde siempre ha navegado, y al abuelo de José Manuel siempre le apasionó la náutica». Vivir cerca del Mar Menor fue lo que los acabó convenciendo de que debían continuar practicando la vela: «Continuamos en este maravilloso deporte gracias a la zona del Mar Menor, donde las condiciones de navegación son muy favorables y nos incitan a practicarlo».

Ambos vienen, como decíamos, de clases juveniles individuales, en las que consiguieron diversos éxitos: «Como todos los chicos que navegamos, venimos de la clase más base de este deporte que es el Optimist. Después, al pasar a la categoría de vela juvenil, comenzamos a navegar en la embarcación Laser 4.7, donde Rafa se proclamó subcampeón del mundo. Con el pasar de los años y de las competiciones, avanzamos a la categoría olímpica femenina de la clase, Laser Radial, en la que conseguimos triunfos individuales de los que destacan el tercero español sub-21 y primero español sub-21. Al finalizar la categoría sub-19 de Laser Radial, Rafa se cambió a 49er con otro tripulante, mientras que Jose se inició en la categoría olímpica masculina Laser Standard formando parte del Equipo Juvenil y siendo cuarto español sub-2».

El Campeonato de España Universitario 2019 fue la primera competición en la que participaron juntos: «En la primavera de 2019, nos proclamamos juntos campeones de España universitarios, siendo la primera competición que hacíamos juntos, lo que dio lugar a la clasificación nacional a la Olimpiada Universitaria 2019, donde hicimos un doceavo puesto de resultado que nos incitó a pensar en formar equipo juntos en este Proyecto Olímpico».

En la clase 49er llevan poco tiempo, pero dicen sentirse cómodos y estar progresando: «La verdad es que disfrutamos bastante entrenando en 49er, ya que es una clase muy dinámica». Consideran que existen dos diferencias esenciales entre la clase 49er y el resto de clases en las que han competido, que son «competir en pareja en un mismo barco y colgarse en trapecio para poder navegar».

A corto plazo, el objetivo principal es «conseguir plaza para el Equipo Preolímpico con la viista puesta en los próximos Juegos Olímpicos de Paris 2024, que son nuestro mayor sueño y objetivo a largo plazo».

José Manuel y Rafael admiten que estudiar una carrera a la vez que preparan una campaña olímpica es complicado, pero «por suerte, los dos estamos en carreras académicas que nos gustan mucho y gracias a ello el tiempo que le dedicamos no se hace pesado y disfrutamos al estudiarlas. También las universidades, tanto la UMU como la UCAM, nos ayudan entrando en los planes de deportistas de élite que nos facilitan un poco con becas deportivas. Con todo eso, se necesita una organización y un planning para poder compaginar de la mejor manera la carrera dual deportiva-académica».

Rafael y José Manuel fueron seleccionados para el Plan Nacional de Tecnificación Deportiva junto a otras cinco parejas de distintas partes de España. «La selección fue por criterio técnico y se basó en los resultados deportivos en las clases juveniles», dicen. Tras estos meses entrenando en el PNTD, afirman que se sienten «muy afortunados de poder haber aprendido de esta experiencia junto a unos compañeros excepcionales y un buen técnico que nos ha ayudado a mejorar y a seguir con nuestro progreso deportivo».

Tras un año entrenando juntos, la compenetración entre ellos ha mejorado bastante: «La compenetración, como todo en un deporte, se entrena, se perfecciona y se mejora a medida que pasa el tiempo y aumenta el nivel. Pero aparte de eso, somos unos deportistas y unas personas muy parecidas, con una personalidad similar que siempre hemos tenido y que nos ha servido para poder crear una amistad deportiva y extradeportiva antes de empezar en el 49er que nos ha valido para poder afianzar la compenetración en el agua. Aparte, ambos somos deportistas bastante profesionales, lo que que simplifica la progresión y ayuda a lograr los objetivos».

Como a todo el mundo, la pandemia afectó a los dos jóvenes regatistas: «Nos afectó muy malamente al principio de todo, ya que nos cortó nuestra primera temporada por completo y nos entorpeció para el comienzo de esta, ya que tuvimos que volver de nuevo a nuevos puntos de control de barco que hasta el comienzo de la pandemia teníamos superados. Una vez comenzada la segunda temporada, a partir de los meses de agosto y septiembre, no nos ha influido mucho».

En principio, si la pandemia lo permite, Rafael y José Manuel competirán en el Mundial Juvenil, que se celebrará en aguas polacas desde el 1 de julio.

Diego Botín y Iago López, dúo español de 49er en Tokio

El madrileño Diego Botín y el gallego Iago López compondrán finalmente la pareja española que competirá en la clase 49er en los Juegos Olímpicos de Tokio. Esta pareja ya compitió en los Juegos Olímpicos de Rio en 2016, en los que se hicieron con el noveno puesto. Botín y López lograron la plata en el pasado Campeonato del Mundial de 49er, celebrado en Australia en febrero, y vencieron en la Lanzarote International Regatta, celebrada en marzo. Tras sus últimos éxitos, lo cierto es que hay muchas esperanzas puestas en ellos para los Juegos de Tokio.