Se podía intuir hace un par de meses que a estas alturas de la temporada la clasificación iba a estar muy apretada en la categoría de plata. Tanto por arriba como por abajo. Pero era difícil imaginar que lo fuera a estar tanto. Y es que no solo los equipos que estaban involucrados en la pelea por no bajar se han mantenido en un pequeño margen de puntos que lo deja todo por decidir, sino que se han ido sumando otros que hace unas semanas parecían fuera de peligro.

Uno de los que se encuentra ahí, por tanto, es el Cartagena, que –eso sí- después de haber encadenado dos victorias consecutivas de mucho mérito ha dado un importante salto en la tabla para situarse fuera del descenso a pesar de que el resto sigue apretando. Una de ellas, ante un rival directo como el Castellón en el que era un duelo a vida o muerte por la salvación. El otro, ante un recién ascendido Espanyol que ha demostrado su nivel durante toda la temporada y al que le pasó factura el festejo del cambio de categoría.

Pueden parecer dos victorias muy distintas –que lo son-, pero a su vez guardan un importante factor en común. En ambos encuentros el conjunto albinegro mostró una sorprendente solidez defensiva que le permitió mantener la portería a cero para hacer efectivos sus goles. Sin embargo, no es un factor que haya llegado en dos partidos puntuales, sino que los de Luis Carrión suman una racha en la que parecen haber dejado atrás uno de sus principales defectos durante la temporada.

No es ni mucho menos casualidad que el Cartagena se encuentre en una situación relativamente privilegiada a día de hoy. Y sería un error quedarse solo en la superficie que supone haber conseguidos dos victorias más que necesarias. En ellas, el factor defensivo ha jugado un papel ten importante como la intensidad y el compromiso que han demostrado los futbolistas sobre el terreno de juego. Aunque seguramente una sea consecuencia de la otra.

El técnico catalán ha conseguido girar el rumbo de un equipo que se desangraba por momentos y partido tras partido. No era difícil ver un encuentro en el que se encajaran dos goles con cierta facilidad. La pareja Raúl Navas-Datkovic, llegada en el mercado de invierno, pareció consolidarse y ha dotado al equipo de unos cimientos defensivos a la altura de las circunstancias.

Y cómo no, hubo un punto de inflexión. Todo pareció cambiar después del partido en Albacete en el que el Cartagena fue tumbado por el colista por dos goles a cero. Hasta ese encuentro incluido, el equipo cartagenero había encajado al menos un gol en cinco de los seis partidos disputados. Después de esto, pareció haber un cambio de mentalidad que ha hecho que en los nueve siguientes se haya dejado la portería a cero en cinco ocasiones. Lo hizo ante Zaragoza, Tenerife, Logroñés, Castellón y Espanyol, valiendo esto un total de 15 puntos. Además, solo en uno de los cuatro restantes -ante el Fuenlabrada- encajó dos tantos, lo que hace que solo haya recibido cinco en esos nueve encuentros.

Y si cuando hablamos de la capacidad ofensiva siempre resaltamos la figura de Rubén Castro, sería injusto no hacer lo propio con la de Marc Martínez. El arquero catalán recuperó la titularidad después del partido ante el Málaga, donde Chichizola volvió a cometer un error que le costó caro y con el que se escapaban dos puntos. Dese entonces, ha dotado al Cartagena de la seguridad que le estaba faltando con el argentino, ya que en los ocho partidos que lleva debajo de la portería de forma consecutiva, solo ha tenido que recoger el balón del fondo de las mallas en cuatro ocasiones.

Más allá de los puntos

El hecho de haber adquirido esta seguridad atrás no solo tiene repercusión directa en las victorias que han hecho que el Cartagena salga del descenso. También la tiene si, teniendo en cuanta la igualdad que existe con respecto al resto de equipos en la clasificación, se diera la circunstancia de que hay un empate a puntos y te tienes que jugar la salvación mirando al gol average.

Los albinegros tienen el particular empatado con Albacete, Logroñés, Castellón, Alcorcón y Zaragoza y tiene pendiente el segundo encuentro con el Lugo. En caso de tener que decidir con el general, los últimos resultados con la portería imbatida estarían siendo decisivos, ya que los de Carrión han disminuido su coeficiente hasta -8 goles, mientras que la mayoría de equipos que están por debajo, tienen una peor cifra.

El Cartagena dio un paso de gigante en la lucha por la permanencia venciendo en casa del Espanyol, líder de la categoría y recién ascendido a LaLiga Santander. Con las dos últimas victorias de manera consecutiva, el camino se ve mucho más claro que hace unos meses. Y es que, con tan solo tres jornadas para el final de liga regular, los de Luis Carrión sacan cuatro puntos de ventaja al Logroñés, en decimonoveno lugar y que marca el corte con los que bajarán a Primera RFEF.

En la parte de arriba de la tabla, El Mallorca dio un paso casi definitivo para lograr el ascenso, que los baleares podrían certificar matemáticamente la próxima semana, tras imponerse este domingo por 2-0 a un Alcorcón, que pese a la derrota seguirá fuera de los puestos de descenso. Ocho puntos saca al Almería, tercer clasificado, por lo que a los de Luis García les bastaría con lograr un empate el próximo miércoles en su visita al campo del Tenerife para regresar, tan sólo un año después, a la máxima categoría del fútbol español. El Leganés, se afianzó en la cuarta plaza tras vencer este domingo por 3-0 a un Logroñés, que seguirá anclado una jornada más en los puestos de descenso.

Los albinegros acarician la permanencia en Segunda

El que también está intentando meterse en el play off de ascenso a Primera es el Rayo Vallecano, que se impusieron este domingo por 1-2 al Fuenlabrada, en un encuentro en el que los locales jugaron todo el segundo tiempo con dos hombres menos por las expulsiones de Randy Nteka y Pathé Ciss en la primera mitad.Una sufrida victoria que permitió al Rayo arrebatar la última plaza de promoción a un Girona, que este lunes podría regresar a los puestos de eliminatorias de ascenso si logra puntuar en el encuentro que le enfrentará en Montilivi con el Sporting de Gijón.

Si el conjunto vallecano deberá seguir luchando hasta el final para poder disputar las eliminatorias de ascenso, el Sabadell se jugará en las tres últimas jornadas la permanencia, tras caer este sábado por 0-2 ante un Tenerife que certificó la permanencia. Un resultado que castigó la falta de mordiente del equipo catalán que nunca llegó a inquietar la portería de un Tenerife. Derrota que deja al equipo arlequinado en la antepenúltima posición de la tabla, eso sí a tan sólo un punto de la salvación, que marca en estos momentos el Castellón.efe