El piragüismo en aguas tranquilas recuperó ayer la competición tras más de un año de inactividad por la pandemia del coronavirus. En aguas de Santiago de la Ribera se disputó un campeonato que contó con los mejores palistas autonómicos, donde el club Escuela Piragüismo Mar Menor se coronó en la clasificación por clubes, superando al Asociación Deportiva Pinatarense.
Pablo Francisco Sánchez Palacios, medallista en el último Mundial júnior que se celebró en 2019, fue el campeón en K-1 senior 5.000 metros. En la prueba femenina se llevó el oro Sara Guerrero, que también pertenece al EP Mar Menor.
En el resto de categorías los ganadores fueron Abel Montesinos (alevín 2º año K-1), Arturo Carrillo (alevín 1º año K-1), Aitana Fidalgo (alevín femenino K-1), Marcos Hernández (paracanoe), Gumersindo Lacal (prebenjamín K-1), Román Skalyha e Irene Martínez (benjamín K-1), Gonzalo Molina (infantil 2º año C-1), Gabriel Hernández (infantil 2º año K-1), Germán Albaladejo (infantil 1º año K-1), Valeria Mateos (infantil K-1), Santiago Castejón (júnior K-1), Jesús Enrique Gavidia (vetearnos 45-54 K-1), Gerardo Hueva (veteranos resto K-1), Sofía Mendizábal (cadete K-1), Sara Guerrero (senior K-1), María Rodríguez (veterano K-1), Sergio López García (júnior C-1), María de las Mercedes Planet (júnior C-1) y Miguel Ángel Pérez Pérez (senior C-1).
