Restan nueve encuentros para que la competición en Segunda División llegue a su fin y todavía está todo en juego. Tanto en la zona alta como en la baja, todo el pescado está por vender y conforme avanzan las semanas tanto la presión como la importancia de los puntos que han en disputa aumentan de forma proporcional.

En la zona baja, el Cartagena se queda a solo dos puntos de los puestos de salvación después de ganar al Alcorcón y salvar un primer ‘match ball’ que en caso de no haber solventado le hubiera dejado a cinco puntos de la permanencia. Mientras, la plantilla dirigida por Luis Carrión trata de reencontrarse y encontrar una regularidad que le permita lograr el objetivo y, si fuera posible, antes de tiempo. En ese partido del pasado lunes, volvieron a relucir nombres que, o bien no habían tenido protagonismo en ningún momento de la temporada, o que por el contrario la han ido perdiendo con el transcurso de los meses.

La realidad, es que parece haber aparecido en el conjunto albinegro una ‘segunda línea’ de la que no se esperaba que tomara la voz cantante, pero ha dado un paso adelante con varios futbolistas relegados a un segundo plano que han hecho despertar al Cartagena en el momento crítico de la temporada.

Los ‘tapados’ reaccionan

La directiva albinegra había confeccionado el pasado verano una plantilla con la que, todo el mundo coincidió, estaba capacitada para luchar por el objetivo de mantenerse en la categoría de plata. Sin embargo, después de una buena racha que le llevó incluso a estar luchando por alcanzar los puestos de play off de ascenso, una mala dinámica le devolvió a la realidad para llegar al mercado de invierno con muchos deberes por delante. En esta ocasión, la comisión deportiva volvió a armar un grupo incluso más competitivo en un mes frenético en el que se incorporó a futbolistas de mucho nivel

Por lo tanto, la afición albinegra se encomendaba a futbolistas de la talla de Rubén Castro, Pablo De Blasis o Álex Gallar. Jugadores que son desequilibrantes y que pueden marcar el factor diferencial en Segunda. Y no es que no lo estén haciendo. El canario suma 13 goles, el argentino parece entonarse y ha dado ya 4 asistencias, mientras que Gallar es de los jugadores que más aporta cuando las lesiones se lo permiten.

Sin embargo, en el momento clave de la temporada, está emergiendo la figura de ese futbolista ‘tapado’ que en un principio no estaba destinado a tener protagonismo, pero que está tirando del carro cuando el equipo más lo necesita. Hablamos de hombres como Berto Cayarga, David Andújar, Carlos David o José Ángel Jurado. Hace apenas dos meses parecían completamente secundarios, y a día de hoy se han ganado un hueco –como poco- en los planes de Luis Carrión.

También lo han hecho por motivo de lesiones Carlos David o David Forniés que apenas habían participado y que ahora dan la cara como nadie.