Desde el pasado 23 de enero lleva Víctor Curto sin vestir la camiseta del Real Murcia. El delantero catalán no ve la luz al final del túnel y lo que parecía un simple esguince en su tobillo izquierdo, que teóricamente le iba a tener apartado dos o tres semanas, se está complicando más de lo que parecía en un principio y son ya más de dos meses los que el ariete lleva de baja en los que se ha perdido la friolera de siete encuentros consecutivos ante Sevilla Atlético, Lorca Deportiva, Linares, Yeclano Deportivo, Córdoba, UCAM Murcia y El Ejido. Casi la mitad de la primera fase de competición. Parecía que iba a reaparecer en el derbi ante el UCAM Murcia o como mucho, en el posterior partido contra El Ejido pero no fue así.

Dos semanas después del término de la primera fase, la incógnita de Víctor Curto aún permanece en el aire y según las palabras de su técnico, José Luis Loreto, en la previa del encuentro, no llama mucho al optimismo en cuanto a su reaparición ante la Balompédica Linense el domingo. «Curto se está metiendo en el grupo. Entra y sale durante su proceso de recuperación. No sabemos si va a ser una semana o dos. Lo que él sienta», decía el sevillano sobre la situación del veterano futbolista.

El papel de Víctor Curto ya había disminuido incluso antes de sufrir el esguince de tobillo. Esta temporada, a las órdenes de Adrián Hernández, el ariete estaba actuando de revulsivo en las segundas partes en su afán por dosificar al futbolista de 38 años. No le fue mal ese papel, ya que en los tan solo 182 minutos ha conseguido convertir dos tantos. Es decir, sale a gol cada 90 minutos. Y además, los goles que ha conseguido fueron de una importancia tremenda. El primero de ellos, ante el Yeclano Deportivo en La Constitución, que sirvió para consumar la remontada grana en los últimos minutos frente a los azulgranas. Su otro gol, ante el UCAM Murcia, también sirvió para remontar el partido en el minuto 80 y dar los tres puntos del derbi murciano.

Y es que si hay algo que no se le puede achacar a Víctor Curto en su etapa como jugador del Real Murcia es su eficacia y eficiencia goleadora. El catalán, durante sus cinco temporadas del Real Murcia ha participado en 70 partidos de liga en los que ha metido 21 goles. Su promedio goleador sale a un gol por cada tres encuentros. Sin embargo, si tenemos en cuenta los minutos en lugar de los partidos, su promedio goleador sale a un gol cada 171 minutos. Es decir, uno cada menos de dos encuentros. Además, no debe quedar en el olvido el pichichi de la Copa del Rey que consiguió en la temporada 2017-2018 con seis tantos.

Pero Curto es más que gol para el Murcia, ya que es un futbolista capaz de crear peligro desde segunda línea gracias a la calidad que atesora. Aparte de ser tremendamente efectivo de cara a puerta también puede dar ese último pase del que tanto está careciendo el Real Murcia esta temporada tanto con Adrián Hernández como con Loreto. Aunque sí que es cierto, que el actual técnico del Real Murcia está intentando imponer un estilo de juego más asociativo que Adrián Hernández y que le podría venir mejor a Curto que un partido ‘correcalles’ por su estado físico, que no es el mejor ni por su edad ni por las lesiones que ha sufrido en las últimas temporadas.

Con la baja de Alberto Toril por acumulación de tarjetas amarillas y la más que posible de Víctor Curto, se le crea un problema a José Luis Loreto de cara al trascendental encuentro que tiene el Murcia en La Línea el próximo domingo ya que tan solo se le queda disponible de nueve puro a Adrián Fuentes.

El fichaje de invierno, que estaba jugando más tirado a banda cuando jugaba junto a Toril, tendrá que asumir los galones en la lanza del ataque en un partido muy importante en eld devenir del Murcia en la segunda fase. Un resultado negativo el próximo domingo podría suponer descolgarse aún más de los dos primeros puestos, los que dan derecho a mantenerse en la tercera categoría del fútbol nacional.