Con la llegada ayer de la Primavera, aunque las condiciones climatológicas en la Región se empeñen en decir lo contrario, el UCAM Murcia CB quería presumir de nuevos brotes verdes para encarar el tramo final de la Liga Endesa tras regresar del último parón oficial de su calendario. Poner fin a la mala racha de derrotas, desplegar más recursos ofensivos y convertirse en un equipo sólido y compacto eran algunos de los objetivos con los que se presentó ayer la plantilla que dirige Sito Alonso en el Santiago Martín (85-78). Sin embargo, se tuvo que marchar sin poder conquistar una pista que se le sigue resistiendo en la Liga Endesa y engordando una cifra de ocho derrotas consecutivas que hacen que el partido de este martes ante el Urbas Fuenlabrada se convierta en la primera fecha señalada en rojo de la temporada.

Cierto es que el UCAM Murcia mejoró ayer su cara en ataque y llevó al límite al Lenovo Tenerife en defensa, pero no consiguió hacerlo durante cuarenta minutos. Los problemas con las faltas, los fallos desde el tiro libre y el atasco ofensivo en el último cuarto dejaron en el aire un partido que acabó cerrando Marcelinho Huertas con sus 26 puntos y 6 asistencias. El flujo anotador del equipo universitario se convirtió en un embudo, al llegar al último minuto y medio de partido con solo 7 puntos en su casillero durante el último cuarto, tras el despliegue ofrecido en la primera parte y la capacidad mostrada para sortear los obstáculos que le sorprendieron en el tercer periodo. Y pese a que el UCAM peleó contra el reloj para amarrarse a las mínimas opciones que le quedaban tras conseguir el Lenovo Tenerife una ventaja de siete puntos, el cuadro murciano no logró que saliese el Sol por su lado al sumar ya tres meses sin conseguir una victoria.

Las tres faltas, todas muy tempranas, en los casilleros de Tomás Bellas y Emanuel Cate cambiaron sobre la marcha el guion establecido de partido. Los argumentos ofrecidos por el equipo para llevarse la victoria siempre acaban manchados por algún ‘pero’ que le está obligando a tener que empezar a mirar hacia abajo, por si hubiese que sacar la calculadora para hacer cuentas que nadie quiere hacer.

Y así afronta ahora el UCAM dos partidos que se antojan vitales frente a dos rivales directos en la clasificación para elegir su camino en los dos últimos meses de la temporada. El nivel desplegado y las sensaciones, por momentos, parece que no deberían hacer saltar las alarmas en el Palacio de los Deportes. Pero los resultados acaban diciendo lo contrario cuando se consumen los cuarenta minutos. Y solo a base de victorias el UCAM podrá seguir reconstruyéndose tras el convulso primer trimestre de 2021.

Porque el equipo murciano fue capaz de disipar las dudas que venía ofreciendo su juego ofensivo en apenas seis minutos. Durante este tiempo,tan solo falló un tiro de campo (9/10) y fue un vendaval anotando 20 puntos en apenas cuatro minutos y medio. Además, DJ Strawberry, uno de los jugadores que más estaba echando en falta el cuadro que dirige Sito Alonso durante las últimas fechas, tiró del carro en ataque. El UCAM supo mantener a raya durante mucho tiempo al Lenovo Tenerife, llegando a contar con hasta nueve puntos de ventaja (9-18). Sin embargo, con las rotaciones en ambos conjuntos, los de Txus Vidorreta salieron mejor parados con la entrada de Marcelinho Huertas, al darle un mordisco importante al marcador pese a las entradas de Jordan Davis (19-22). Aún así, el UCAM supo aguantar el arreón del cuadro local con las visitas al tiro libre y encadenando buenas defensas (23-26).

Los puntos de Shermadini en la pintura y en el tiro libre permitieron al Lenovo Tenerife liderar el marcador por primera vez en el partido, aunque Caio Pacheco respondió desde el triple rápidamente (28-29). El UCAM contestó de la mejor forma posible a la reacción tinerfeña y la electricidad del joven brasileño permitió al UCAM firmar un parcial de 0-8, pero el guion se complicó para el equipo murciano con la tercera falta de Cate cuando todavía restaban seis minutos para el descanso. Los de Sito Alonso continuaron encadenando buenas defensas, lo que les permitió no perder la confianza en ningún momento. La tercera falta de Bellas, al igual que Cate, obligó el regreso de Pacheco y el Iberostar consiguió igualar de nuevo el resultado a un minuto para finalizar la primera parte (42-40).

En apenas 20 segundos el UCAM ya se cargó con dos faltas y Rojas apagó esa crisis desde el triple, al que respondió rápidamente el Lenovo Tenerife (45-45). Una antideportiva del alero dominicano permitió a los de Txus Vidorreta llevar la iniciativa en el marcador tras convertir desde el tiro libre. Fue entonces cuando el UCAM empezó a perder su fluidez y acierto en ataque ante la defensa tinerfeña, y el parcial de 7-0 fue el primer golpe local de la segunda parte (49-45). Pero un triple de Webb, y dos puntos de Bellas parecían resolver los problemas ofensivos a falta de cuatro minutos para finalizar el tercer tiempo con los dos equipos en bonus (56-55). Después de unos intercambios de golpes, en los que ambos equipos no acertaron, el UCAM consiguió salir airoso de este tramo difícil de partido con los puntos de Davis y Radovic desde el poste bajo (63-61).

Sin embargo, en los primeros cuatro minutos del último cuarto, el UCAM solo fue capaz de anotar dos puntos, mientras que Marcelinho Huertas daba oxígeno al Lenovo Tenerife con dos canastas consecutivas (67-63). Los de Sito Alonso continuaron con sus problemas de faltas, perdiendo a Cate, y aferrándose a la defensa para mantener el marcador en los mismos dígitos. Pero el UCAM perdonó demasiado. Tanto, que el Lenovo Tenerife se cansó tras dos tiros fallados por Webb consiguiendo un triple de Cavanaugh que puso el partido cuesta arriba para los murcianos (70-63). Huertas se encargó de cerrar el partido, mientras que el UCAM no se cansó de batallar mandando a su rival al tiro libre hasta que el reloj dijo lo contrario (85-78).