El Yeclano Deportivo realizó en el entrenamiento de ayer un pequeño homenaje a Pablo Vivanco, carismático mediocentro defensivo que realizó una comparecencia pública delante de sus compañeros para anunciar su retirada. Este centrocampista argentino, que ya había sufrido reiteradas lesiones en sus rodillas, deja el fútbol a los 31 años por recomendación médica, tras meses de trabajo de recuperación.

Vivanco se lesionó en el último minuto del partido del play off a Segunda en Marbella frente a la Cultural Leonesa tratando de rematar un córner con la eliminatoria ya sentenciada, y pese a que ha trabajado duro para recuperarse, su rodilla ha dicho basta. El club y Sandroni seguían pendiente de su evolución durante estos meses al ser un jugador muy importante en el centro del campo y vital dentro del vestuario.

Con un emocionante discurso, mostró su gran agradecimiento a la directiva, al cuerpo técnico, a los compañeros y a la afición. «Gracias a los valores que te inculcan en el Yeclano Deportivo soy mejor persona. Jugar aquí ante 4.000 linternas encendidas cantando el Abuelo es mágico, y ahora va a haber una linterna más en la grada apoyando», dijo. El centrocampista argentino hizo toda una arenga al equipo. «Le deseo la mejor de las suertes al equipo en este tramo final de temporada y que con esfuerzo le den la vuelta a esta situación que están atravesando, porque en Yecla todo es posible», explicó.

Pablo Vivanco se formó en la cantera del Elche, y siendo todavía sub23 fichó por el Murcia Imperial, llegando a debutar en Segunda con el Murcia de Iñaki Alonso. Posteriormente estuvo en equipos de Segunda B como el Olimpic de Xátiva, Orihuela, Eldense, Mérida y desde 2016 en el Yeclano Deportivo, donde jugó dos play off de ascenso a Segunda B logrando uno de ellos, y el play off de ascenso a Segunda que le provocó la lesión de su retirada.