El UCAM Murcia CB de los imposibles volvió a aparecer. Y es que parece que este equipo se motiva más cuando más difícil lo tiene. Si ya en la primera vuelta fue capaz de vencer al Baskonia en su casa y al Barcelona en el Palacio, ayer le motivaba la idea de cerrar el primer giro al calendario -oficialmente- con la primera victoria de su historia en la cancha del Real Madrid. Cuando nadie daba un duro por esa gesta, visto lo visto en la segunda parte del pasado domingo frente al Barcelona, y lo ofrecido en las derrotas frente al Hereda San Pablo Burgos y el BAXI Manresa tras el parón por el brote por coronavirus en la plantilla universitaria, el UCAM recuperó la chispa.

Sito Alonso guionizó un partido sin escudos. Aceptó el intercambio de golpes y confió en el acierto y la buena ejecución por parte de los suyos. Y así fue. El UCAM no rompió ayer la fatídica estadística en las canchas que le quedan por conquistar en la Liga Endesa. Pero sí que consiguió firmar su cuarto más anotador de la temporada. Y lo hizo frente al líder y en su casa. Tan solo le bastaron diez minutos para anotar 32 puntos a todo un Real Madrid y sacarle ventaja con la defensa en zona planteada por el entrenador madrileño de inicio.

Además, la puesta en escena del nuevo actor no pudo ser mejor. Y es que James Webb, quien llega para sustituir a David DiLeo por lesión, tuvo la mejor carta de presentación posible con 12 puntos y 6 rebotes con apenas un par de sesiones de trabajo con sus nuevos compañeros. La simple presencia del norteamericano en pista, aporta mucho más recursos de los que tenía anteriormente el propio UCAM en un juego interior que está siendo la zona más mermada desde su regreso a la competición. No obstante, pudo sacar de sus casillas a Pablo Laso, cuando el técnico madridista superando en rebotes a su rival antes del descanso. Radovic y Frankamp, con 24 y 20 puntos cada uno, fueron los máximos anotadores, junto a los 18 de Davis, ante un Real Madrid que utilizó los centímetros y la presencia de Tavares (16 puntos y 15 rebotes) para cambiar la dinámica del encuentro tras el descanso.

El UCAM se quedó bloqueado tras el paso por vesutarios, y los nueve puntos anotados en el tercer cuarto fue lo que le dejó sin opciones de dar la campanada en el resto del encuentro. Por lo que el domingo tendrá la última oportunidad de finalizar esta ´maratón' con un triunfo frente al Joventut antes del parón de febrero.

El UCAM Murcia fue torbellino ofensivo en el primer cuarto. Los de Sito Alonso encontraron rápidamente la fluidez en ataque que habían perdido en los últimos encuentros y consiguieron anotar 18 puntos en apenas cinco minutos frente a todo un Real Madrid. La defensa en zona planteada por el técnico madridista desconcertó a los de Pablo Laso en unos primeros compases donde la frescura de Alocén fue la mejor baza de los locales (9-18). Un triple de Garuba recortó distancias y provocó el primer tiempo muerto solicitado por el banquillo universitario. James Webb entró pronto en la rotación y dejó su carta de presentación prácticamente en el primer balón que tocó con un triple que colocó la distancia en siete puntos cuando menos de un minuto para la conclusión (24-32).

El Real Madrid logró frenar al UCAM en los primeros instantes del segundo cuarto, hasta que Jordan Davis anotó de dos. Los de Pablo Laso trataron de subir un punto más de intensidad en los dos extremos de la pista, y eso sirvió para darle el primer mordisco al marcador después de un triple de Llull a falta de seis minutos para el descanso 32-34. Un parcial de 11-2, parecía noquear de primeras al UCAM. Pero la falta de Rudy ante Davis, que cortó una contra, y Lima, en la pintura, volvieron a permitir al equipo murciano dominar el marcador y encender el ´turbo' de nuevo con el 37-40. Taylor y Frankamp se retaron desde el triple, y tras empatar el marcador el Real Madrid, el base nortamericano mantuvo por delante a los suyos antes de que Pablo Laso solicitase tiempo muerto (40-43). El equipo murciano mantuvo la explosividad del arranque en el último minuto de la primera mitad, pero una falta en la última acción de Bellas sobre Sergi Llull mandó al madridista al tiro libre (47-51).

El Real Madrid mostró claramente sus intenciones en el arranque de la segunda mitad igualando de nuevo el partido con Tavares y adelantándose por mediación de Alocén (53-51) a los dos minutos del tercer cuarto. Aquí fue cuando llegaron las primeras dudas en el ataque universitario, y que Sito Alonso intentó recordar a los suyos la importancia de seguir el plan trazado en campo contrario. Pero un triple de Rudy Fernández rompió por primera vez y por completo el partido (68-57). El UCAM no pudo maquillar su borrón en el tercer cuarto en el WiZink, y tan solo un triple de Webb dejó la distancia en trece puntos (73-60).

Después de una media hora fulgurante y sin apenas pausas en el reloj, llegó un último cuarto marcado por las constantes visitas al tiro libre. El UCAM, en su peor asignatura, mostró unos brillantes resultados con un 88% de acierto en esta línea. Pero no fue su noche (82-72). La distancia de diez puntos no bajó en ningún momento al acertar ambos equipos en sus lanzamientos, y pese a que el UCAM tuvo posesión para colocarse a tan solo cinco puntos de distancia cuando quedaban un par de minutos, el Madrid terminó amarrando su victoria (98-87).

Sito Alonso, entrenador del UCAM Murcia, se mostró satisfecho del rendimiento de sus jugadores pese a la derrota contra el Real Madrid por 98-87 porque el equipo jugó un gran baloncesto durante muchos minutos y demostró que está «más cerca» del nivel que tenían antes de que le afectase la pandemia de coronavirus. «Volveremos a ser los que éramos», pronóstico en la rueda de prensa posterior al partido aplazado de la jornada 19 de la Liga Endesa. A su juicio, sus hombres completaron un gran primer cuarto en el que anotaron 32 puntos y merecieron «una ventaja mayor» ya que supieron jugar a «muy buen ritmo» y defendieron a su rival «bastante bien».

«Hemos mantenido el nivel en el segundo cuarto», continuó Alonso, que destacó el importante papel desempeñado en esa fase del partido por Sergio Llull , que impidió a los suyos irse con una mayor diferencia de puntos al descanso.

La clave del partido estuvo, según el técnico del UCAM , en los tres o cuatro primeros minutos del tercer acto, cuando encajaron un parcial de 9-0 en contra y se dejaron llevar por la intensidad de su oponente. «No supimos jugar con el mismo orden y paciencia, acelerando nuestro ritmo ofensivo y dándole mayores ventajas», resumió. «En el último cuarto hemos luchado mucho, pero no hemos estado inteligentes en situaciones de bonus y han ido demasiado fácil a la línea de tiros libres. Hemos tenido dos bolas para ponernos a cinco y las hemos fallado, pero estamos más cerca de nuestro nivel», concluyó Alonso.