Confiado, con ganas de trabajar y consciente de que tiene un equipo más que capacitado para lograr la salvación. Así se mostró Luis Carrión en su presentación como nuevo entrenador del Cartagena. El míster catalán dejó claro cuál quiere que sea la seña de identidad de ´su' Cartagena: «Vamos a intentar que sea un equipo valiente en todos los sentidos. Quiero un equipo con seguridad defensiva y que no tenga miedo a perder. Vamos a intentar ser atrevidos, no suicidas», aseguraba el nuevo entrenador albinegro.

Carrión ya había dirigido su segunda sesión con el grupo antes de sentarse por primera vez en la sala de prensa de su nueva casa. La primera toma de contacto con el grupo "ha sido buena", pero es consciente de que tiene que levantar a un grupo algo tocado: «Es normal que estén preocupados por la situación. Lo que pasa es que a veces esa preocupación te ciega un poco. Hay que saber que no estamos hundidos y que quedan muchos partidos por delante. Lo más importante es que el equipo tiene calidad, que es lo difícil. El tema mental es importante pero transitorio. Se les pasará», afirmaba. «Lo más importante es tener personalidad, abstraerse un poco de todo y trabajar. Que cada entreno sea como un partido. Y tener personalidad, no hundirse».

El técnico se pone al frente de un equipo al que ve capaz de conseguir los objetivos marcados: «La plantilla es buena. Es mejorable, como todas en el mundo. Pero he encontrado a los jugadores con muchas ganas y con mucha motivación por ganar partidos. Hay futbolistas con mucha calidad, que son diferenciales en la categoría», afirmaba. Eso sí, no son todos los que tiene ahora son los jugadores de los que va a disponer después del mercado: «Cuando acabe el mercado veremos lo que tenemos, pero estoy seguro de que estaremos preparados para conseguir el objetivo».

Luis Carrión ya sabe lo que es entrenar en Segunda División. Su último paso por la categoría de plata culminó con descenso a las órdenes del Numancia. Sin embargo, no guardan un mal recuerdo de él: «Me sorprende porque muchas veces en el fútbol se vive de pasiones. La gente supo ver que nos dejamos la vida para lograr salvar al equipo. Y es lo que quiero hacer aquí: dejarme la vida y pelear por todos los puntos que haya en juego», concluía el técnico.