Ser campeón de invierno no otorga ningún premio. Solo es un título honorífico. En el subgrupo B del Grupo IV de Segunda B ha sido el UCAM Murcia el equipo que ha acabado la primera vuelta como líder sólido. Los universitarios, que el pasado sábado remontaron al Recreativo Granada (2-1), comandan la clasificación con veinte puntos después de nueve partidos, de los que se han ganado seis, empatado dos y perdido solo uno, curiosamente el derbi frente al Real Murcia.

Esos números han permitido al equipo entrenado por José María Salmerón cerrar la primera vuelta como campeón de invierno. No es la primera vez que los de azul y dorado logran ese título honorífico. Ya lo consiguieron en la temporada 2014-2015, cuando Eloy Jiménez se sentaba en el banquillo de La Condomina. Deberán tomar nota en el UCAM de esa campaña, y es que el liderato al cierre de las 19 jornadas iniciales no significó posteriormente el ascenso a Segunda División, y es que los murcianos no pudieron aguantar el ritmo, acabando la competición en segunda posición (65 puntos) por detrás del Cádiz (76). Ya en el play off eran eliminados por el filial del Athletic de Bilbao.

Hasta ahora, de su corta historia, era la única ocasión en la que el UCAM había cerrado como líder el primer tramo liguero. Pero esta temporada 20-21, en la que desde La Condomina han realizado un gran esfuerzo para volver al fútbol profesional, se ha vuelto a conseguir. En un curso diferente, con una mini liga de 18 jornadas para empezar, Salmerón ha logrado que su equipo marque el ritmo desde el principio. Con 23 puntos es un líder sólido, aunque el Linares (17 puntos) no se despega.

Este campeonato de invierno es el primero para José María Salmerón en el banquillo del UCAM, y es que en su anterior paso por La Condomina tuvo que esperar a la segunda vuelta para remontar, apartando al Real Murcia del liderato y ganando el billete al play off como campeón, ascendiendo frente al Real Madrid Castilla.

En esa campaña 15-16, los universitarios acababan la primera vuelta en segunda posición con 38 puntos, cuatro menos que un Real Murcia que se hundió en el tramo final del campeonato. También llegaron a enero segundos en la 18-19, curso en el que tenían un punto menos que un FC Cartagena que se llevaba el título invernal. En la 17-18, los murcianos cerraron la primera vuelta como cuartos con 33 puntos, a tres de los albinegros, que de nuevo llegaban líderes a la segunda vuelta.

Los peores números en Segunda B, quitando el año de su estreno (2012-2013), se firmaron el pasado curso. Tras las primeras diecinueve jornadas, los universitarios ocupaban el puesto undécimo con solo 23 puntos.

Ahora, los de Salmerón tendrán que confirmar ese primer puesto en una segunda vuelta de solo nueve jornadas.