Cinco puntos de los último 30 cosechados y una eliminación en Copa del Rey. Es el balance que tiene el Fútbol Club Cartagena desde que terminara el mes de octubre de 2020 y empezara una racha negativa que dura, de momento, hasta el día de hoy y que solo se vio aliviada en Málaga con la única alegría desde entonces. Una forma nefasta de cerrar el año que ha tenido cierta continuación con el inicio del actual con el empate que sacó el Zaragoza del Cartagonova el pasado sábado en otro duelo directo errado por los albinegros.

Durante estas semanas se ha hablado mucho de las carencias defensivas que tiene el ahora equipo de Pepe Aguilar y anteriormente de Borja Jiménez. Errores, desajustes y falta de contundencia que le han costado muy caro al Cartagena, como se refleja en la clasificación y en la trayectoria descendente que ha sufrido. Unas necesidades que desde hace dos semanas están tratando de ser corregidas por el técnico madrileño y que también se tratarán de solventar en el mercado de invierno, en el que de momento solo se han producido las salidas de Cordero y de Sergio Lozano.

Sin embargo, la más que evidente debilidad en la línea trasera -no solo provocada por los defensas- está siendo acompañada por la baja producción goleadora durante las mismas semanas.

No es ningún secreto que la fragilidad defensiva está haciendo mucho daño al Cartagena. Pero tampoco es el único motivo de la caída en picado. Si bien en los últimos 11 encuentros -momento en el que se inició la mala racha-, los albinegros han encajado 20 goles, también lo es que en esos mismos partidos solo ha sido capaz de ver puerta en 9 ocasiones. Una pobre cifra que llama la atención con respecto a los anteriores ocho choques, en los que el conjunto albinegro fue capaz de ver puerta en 14 ocasiones. Es decir, ha pasado de hacer casi dos goles por partido a hacer menos de uno.

El contraste de números se debe sin duda a los problemas para generar y especialmente materializar ocasiones. Llama la atención el hecho de que en algo más de dos meses solo cinco jugadores han sido capaces de ver puerta y no de forma equitativa. Por encima de todos, destaca Elady Zorrilla, que ha hecho más de la mitad de esos goles. Cinco tantos para el jienense que sigue de lejos Rubén Castro, con dos tantos. Detrás de ellos, Gallar, Andújar y De la Bella aparecen con uno.

En esa lista no aparece el nombre de ningún futbolista de medio campo. La segunda línea del Cartagena está teniendo una aportación escasa durante toda la temporada, pero en este caso ha sido nula. Hay que remontarse hasta el 24 de octubre para ver el último gol anotado por un jugador de medio campo, cuando Carrasquilla hacía su único gol de la temporada. Antes de él, solo José Ángel Jurado fue capaz de hacerlo abriendo el marcador en la jornada 5 en Ponferrada. Ni Nacho Gil, ni Clavería, ni William, ni Cayarga... La segunda línea albinegra apenas ha dado puntos.

A eso se le suma el hecho de que los hombres de arriba no atraviesan su mejor momento y que los recambios han participado poco y mal. Por ejemplo, Harper y Simón Moreno distan mucho de los titulares y cuando han salido al campo han sido casi invisibles.

Todavía con el partido del pasado sábado coleando, el empate logrado por el Zaragoza en los últimos minutos impidió que el Cartagena lograra una victoria clave. Andújar mostraba su descontento: «Se nos queda un sabor agridulce por haber podido ponernos en ventaja y que se nos escapase al final. Por supuesto que estamos jodidos por no haber podido conseguir los tres puntos, pero ya hay que cambiar la mentalidad», comenta.

Un cambio que pretenden hacer que se produzca en el encuentro del próximo domingo ante otro rival directo: «El domingo tenemos un partido vital en el que tenemos que salir a muerte a por los tres puntos. Tenemos muchas ganas de conseguir la victoria en Tenerife. Vamos con las máximas ganas e ilusión de poder hacer un buen partido y ojalá podamos volvernos con los tres puntos en el bolsillo», afirmaba el de Torrejón.

A pesar de su mala racha, el Cartagena continúa fuera de los puestos de descenso: «Es importante no estar abajo. Tenemos que conseguir los máximos puntos posibles de aquí a final de temporada. Ojalá podamos seguir sin pisar los puestos de descenso en ningún tramo de lo que queda de campeonato», aseguraba el goleador del sábado en el Cartagonova.

El incremento de los casos positivos no es ajeno, por supuesto, al mundo del fútbol. Tampoco, a los equipos de la región. En este caso, el Cartagena ha informado de que un miembro del cuerpo técnico ha dado positivo en las pruebas realizadas tras el encuentro frente al Zaragoza del pasado sábado. El club albinegro no ha desvelado la identidad de la persona, pero sí que ha transmitido que se encuentra en aislamiento y en buen estado de salud.

Unas horas antes, el Real Zaragoza anunciaba que su jugador Álvaro Tejero había dado positivo en las correspondientes pruebas. El jugador disputó alrededor de 20 minutos sobre el césped del Cartagonova en la segunda parte, antes de que su equipo lograra hacer el tanto del empate que privaba de la victoria al Cartagena.

La semana pasada también se informó de que Marcin Bulka, guardameta polaco, había dado positivo antes de volver de su país, donde estaba pasando las vacaciones y que no regresaría a España y, por tanto, al trabajo con el grupo hasta que se resolviera su situación.