Cuando el pasado mes de febrero, el Real Murcia aprovechaba una de sus Juntas de Accionistas para aprobar una nueva ampliación de capital, muchas voces autorizadas pronosticaban que los dos millones doscientos mil euros en títulos que se iban a poner a la venta durarían poco o nada en el ´mercado'. El interés que se había despertado solo unos meses antes con el lanzamiento de préstamos participativos -se recaudaron 800.000 euros- reforzaban la teoría de que el Real Murcia viviría su particular Juego de Tronos. Finalmente, el asalto al poder grana no se produjo. La ampliación de capital, reactivada por los aficionados, fracasó en lo que se refiere a la participación de los pretendientes que llevaban meses postulándose para desplazar a Francisco Tornel, presidente y máximo accionista de la entidad, y al KBusiness.

Aunque todas las miradas estaban en Enrique Roca, empresario lorquino que había entrado con fuerza en el capital social al adquirir 200.000 euros en prestamos participativos, el constructor, excusándose en la crisis económica provocada por la pandemia del coronavirus, no aparecía durante el proceso de ampliación de capital, poniendo solo una cantidad testimonial. Francisco Tornel, por su parte, crecía hasta los 270.000 euros, manteniendo su poder.

El Juego de Tronos que no se vivió a mitad de este 2020, podría vivirse en el inicio de 2021, y es que los pretendientes por ganar fuerza en las oficinas de Nueva Condomina tienen otra oportunidad para seguir avanzando dentro del capital social. En la Junta de Accionistas del pasado sábado se aprobaba una ampliación de capital por dos millones de euros en préstamos convertibles. Esta vez, el Real Murcia no mira al aficionado de a pie, en esta ocasión, el Real Murcia mira a los empresarios que se pelean porque sus nombres salgan unidos al de la entidad grana, que pese a estar en Segunda B mantiene su estatus mediático.

Los pretendientes no tendrán que esperar ni medio segundo para convertir en realidad las eternas promesas que deslizan en los medios de comunicación. Desde ya mismo, hay disponibles dos millones de euros en créditos convertibles. Se pueden adquirir en paquetes de 5.000 euros, y ni hay límites ni hay derecho de suscripción preferente. Una vez aprobado en Junta, los interesados ya pueden llamar a las puertas de Francisco Tornel o los consejeros para participar.

El dinero prestado, sin intereses, vencerá el 28 de febrero. Será a partir de esa fecha cuando esas cantidades serán convertidas en acciones, siendo inscritas en el Libro de Socios y pasando a formar parte del capital social de la entidad.

Todas las miradas, una vez más, apuntan a Enrique Roca. El empresario lorquino tendrá una nueva oportunidad para conseguir lo que lleva deseando desde que empezó a asociarse a la entidad grana gracias al acuerdo que firmó para poner su nombre a Nueva Condomina. Se espera que Roca no falte en este proceso, sobre todo después de ver cómo el sábado ganaba poder al entrar en el consejo de administración, aunque no lo hará personalmente, sino que estará representado por el abogado Francisco José Pérez Alcázar.

También habrá que estar atentos a los movimientos de Francisco Tornel, quien cuenta con 270.000 euros, o del KBusiness, que a los 150.000 euros en títulos que dispone hay que unir los casi 300.000 que logró reunir después de obtener la cesión de los títulos de distintas empresas colaboradoras.

En la lista de principales accionistas de la entidad aparecen otras empresas como Prevemur y Gesa, dos de las sociedades que ya acudieron a la llamada del consejo de administración cuando a finales de 2019 se pidió dinero a cambio de convertirlo posteriormente en acciones. La empresa de prevención de riesgos laborales, que se está encargando de todos los controles a los que los jugadores se someten por el coronavirus, no solo está en el capital social con más de 80.000 euros, sino que además su responsable, Francisco García, entró el sábado en el consejo de administración.

Incluso la oposición al actual equipo de gobierno tiene la oportunidad de ganar poder. Higinio Pérez, que tiene unos 85.000 euros en acciones, también podría adquirir algún paquete para no quedar descolgado dentro del capital social.