El Yeclano logró su ansiada primera victoria de la temporada contra todo pronóstico en casa del Rayo Majadahonda, uno de los aspirantes al ascenso a Segunda, que permanecía invicto en el Cerro del Espino. Vaquero, en el último minuto de la prórroga, cambió el signo de la diosa Fortuna, logrando el tanto del triunfo, que aporta al equipo la autoestima de la que había carecido hasta ahora.
El equipo de Sandroni volvió a mostrar buenas trazas y compitió de tú a tú ante un rival plagado de calidad. Karim tuvo la primera del encuentro en un exquisito pase de Fenoll, pero lanzó fuera en excelente posición. Esto despertó a los madrileños, que dieron un arreón con dos ocasiones peligrosas, en especial un larguero de Raúl Sánchez.
El conjunto azulgrana alcanzaba de nuevo el descanso con 0-0 y buenas sensaciones como en las tres derrotas anteriores, pero esta vez la suerte iba a cambiar de bando. Trabajando ordenadísimo y con alguna presión arriba que casi cuaja, el Yeclano seguía mostrando competitividad. A los ocho minutos de la reanudación hubo un nuevo indicador de que la cosa cambiaba con otro zapatazo al larguero de los madrileños, y al cuarto de hora, llegó el primero azulgrana. Rechace en la frontal y Javi Saura pegó golpeando en un defensor y engañando a Giffard.
La alegría momentánea duró poco porque el destino tenía guardado otro capítulo mítico a grito de ´sí se puede´. El 1-1 fue un remate de Fran Núñez a centro de Borja González. A partir de entonces, con peloteros como Carlitos y Néstor Susaeta, el Rayo Majadahonda ponía en apuros a un Yeclano extremadamente solidario en el esfuerzo. Sandroni metió a Fran Martínez por problema muscular de Chino, y empezó uno tras otro a renovar las fuerzas con hasta seis cambios, el último autorizado en prórroga. Al filo del final de los 90 reglamentarios se dio un nuevo guiño del destino con la expulsión del local Borja González y poco después con otro larguero del Rayo.
Achicando agua con valentía y pundonor, el Yeclano logró salvar la primera parte de la prórroga y fue más en los 15 minutos finales. Tonete dio dos avisos, uno plantándose solo en el área, y el Yeclano daba muestras de ir a más en este sprint final de lo que parecía unos claros penaltis. Cuando todos empezaban a recordar los penaltis parados por Gianni en Atzeneta y Alcoy, llegó el éxtasis de la mano del Comandante Álex Vaquero. No podía ser otro el que anotara este gol que significa tanto y que explota de emociones a un equipo descolgado pero no desahuciado.
Todas las copas que llevamos de menos en este 2020 parecieron servirse en esta eliminatoria para por fin pasar de ronda en la Copa del Rey y no dejar pasar desapercibida la histórica tercera participación consecutiva de un Yeclano al que le van a saber muchísimo mejor los turrones y a un Sandroni que tuvo un regalo de cumpleaños absolutamente memorable.
