ElPozo estará en cuartos de final de la Copa del Rey tras vencer con claridad (3-0) a un Zaragoza que, aunque lo intentó, nada pudo hacer ante un equipo que se mostró solvente y serio. Con carácter y las ideas claras, algo que necesitaban mostrar. Además, estaba el peligro de formar parte del grupo de los favoritos que no habían logrado pasar de ronda como el Jimbee, al que se medirán en Cartagena el próximo lunes en el derbi regional, o el Palma.

El primer tiempo iba a dejar ya finiquitado un partido en el que este periodo inicial fue tremendamente plácido para ElPozo, que dominó todos los aspectos tácticos del partido y tuvo el dominio y la intención. Y además, como premio, esta vez acompañaron los goles. Como novedad estaba el regreso de Pol Pacheco, jugador llamado a desequilibrar los encuentros, que volvía tras cumplir su sanción, y que dejaría destellos de la gran clase que asesora aunque todavía le falte ritmo de competición.

Al poco de echar a rodar el balón Rafa Santos avisó con un lanzamiento al larguero para posteriormente, en el minuto 3, hacer el primero del partido. La escuadra murciana se mostraba muy rápida y vertical ante un Zaragoza que no encontraba comodidad alguna sobre la pista y cuyas ocasiones de peligro eran casi nulas. El dominio de ElPozo volvió a plasmarse sobre el luminoso, esta vez agradecido con los pupilos de Giustozzi, cuando Fernando hizo el segundo antes del ecuador de la primera parte. La propuesta de juego del conjunto de la capital del Segura se veía recompensada, algo raro. Y si bien el Zaragoza logró dar un paso al frente para demostrar que no había venido de visita a Murcia, ElPozo logró contener el empuje maño controlando la situación con disciplina y tranquilidad. Fue como una pequeña marejada en en una travesía calmada, un pequeño sobresalto que no puso nervioso a los locales quienes pusieron el 3-0 en el marcador por medio de Felipe Valerio justo antes del descanso dejando el duelo resuelto y el segundo tiempo como un mero trámite.

Tras el paso por vestuarios se esperaba la reacción del Zaragoza, y avisos serios hubo por parte de los visitantes, pero Espindola se mostró muy seguro desbaratando las ocasiones de las que dispuso el plantel dirigido por David Marín. Y ElPozo, que pareció dejar hacer a su rival, decidió entonces que le tocaba el turno de la pelota, la cogió y empezó a sembrar peligro. No era el peligro de otras veces, éste de verdad que podía transmitirse. Le hacía mucha falta a los de Giustozzi un encuentro así.

El encuentro se fue tranquilizando, quedando en muchos momentos el balón en tierra de nadie, algo a lo que contribuyeron los de la elástica del jamón tras lograr adecuar el partido al ritmo que les convenía. El reloj fue descontando minutos entre ocasiones aisladas cuando saltó Eloy Rojas de portero jugador para intentar reducir distancias en un marcador que ya había avisado de que el partido había terminado mucho antes. Y es que ni siquiera el ataque en superioridad funcionó para los visitantes, quienes se encontraron con una defensa muy coordinada y sólida que dejó los huecos mínimos para poder acceder a la meta de Espindola, que mantuvo la meta a cero en un encuentro que, más allá del premio que supone avanzar de ronda en la Copa, pone de manifiesto que ElPozo es muy capaz de jugar bien y hacer daño.