El Real Murcia remontó el domingo al líder UCAM Murcia en el duelo capitalino que se jugó en Nueva Condomina. La victoria ante un rival invicto permite a los granas marcharse de vacaciones con una sonrisa. Sin embargo, cuando la competición liguera regrese el segundo fin de semana de enero, la lista de deberes para el equipo entrenado por Adrián Hernández todavía será extensa. Y es que pese a ganar todos los enfrentamientos regionales -Lorca Deportiva, Yeclano y UCAM- y a las buenas sensaciones dejadas contra el Córdoba, el Real Murcia ha llegado a la jornada 8, la penúltima de la primera vuelta de esta fase inicial en Segunda B, sin ser capaz de aprovechar la ausencia de rivales fuertes -solo el UCAM camina a paso firme- y sin poder consolidarse entre los tres primeros, una zona en la que sí se ha colado el Linares, un recién ascendido de Tercera División.

Solo una semana han dormido los murcianistas en la cabeza de la clasificación. Solo una semana, la posterior a la remontada frente al Yeclano, ha disfrutado la afición de ver a su equipo en las posiciones que garantizan el billete a la Liga Pro para la próxima temporada y que permitirían pasar a la siguiente fase con opciones de clasificarse para el play off de ascenso.

Aunque la falta de ambición en las últimas campañas ha convertido al Real Murcia en un club conformista, en el que se celebran los octavos, novenos o décimos puestos, como ha ocurrido en los dos cursos anteriores, este año los granas están obligados a acabar entre los tres primeros para evitar complicaciones, y por ahora, la trayectoria de los de Adrián Hernández, muy irregulares durante toda la primera vuelta, no es suficiente.

Con la suerte de cara, al quedar encuadrados en un grupo con rivales bastante modestos, los granas han caminado lo que va de competición tocando los tres primeros puestos, pero sin ser capaces de dar el salto. Solo una semana, la posterior a la remontada frente al Yeclano, alcanzaron esa zona, colocándose en la segunda plaza, solo por detrás del UCAM Murcia.

Con la derrota frente al Córdoba se confirmó que la principal característica del Real Murcia actual es la irregularidad, una condición que no es nueva, ya que el pasado curso, que se cortó antes de tiempo por la pandemia, los granas nunca fueron capaces de encontrar estabilidad en lo que a resultados se refiere, combinando victorias importantes como las logradas ante el FC Cartagena, el Córdoba o el UCAM con derrotas incomprensibles ante rivales que no estaban dando el nivel.

Solo hay que ver la trayectoria del Real Murcia en la temporada pasada y en lo que va de esta para darse cuenta de cuál es la asignatura pendiente de Adrián Hernández. Si esta campaña todavía no han logrado sumar dos triunfos consecutivos, la anterior solo se consiguió dos veces. La primera en septiembre de 2019, cuando se venció al Talavera y al Villanovense, y la segunda en enero de este 2020, cuando se encadenaron tres triunfos -Cádiz B, Algeciras y Córdoba-.

Esa irregularidad semanal hace imposible que el Real Murcia se haya aprovechado de la crisis deportiva del Córdoba, que incluso ha cambiado de entrenador, o de la gran igualdad que hay entre los filiales. De momento esa tercera posición que debería estar ya desde hace varias jornadas en manos de los de Adrián Hernández está por ahora ocupada por un recién ascendido como el Linares, que, pese a ganar solo un partido en el primer mes de la competición y recibir un doloroso 3-0 en Nueva Condomina, ha sido capaz de sobreponerse, encadenando cuatro jornadas sin perder, con tres victorias y un empate.

A la vuelta de la competición el 10 de enero se disputará la última jornada de la primera vuelta. El Real Murcia, que ahora mismo es cuarto con un punto menos que los jienenses, tendrá que visitar el campo un El Ejido 2012 que anda en plena crisis de resultados. Su buen inicio de liga sorprendió a todos, pero las noticias positivas pronto acabaron en el cuadro almeriense. Ahora mismo están en zona peligrosa. Son octavos con 8 puntos y no ganan desde el 1 de noviembre, cuando se impusieron al Yeclano (2-0). Desde aquel día han encajado cuatro derrotas y un empate.