El Real Murcia y el Real Murcia Baloncesto, que inician este fin de semana sus respectivas competiciones tanto en la Segunda División B como la LEB Oro, realizaron ayer por la tarde una ofrenda a la Virgen de la Fuensanta en la Catedral para que les 'ayude' a cumplir los objetivos marcados para el tan díficil curso que se viene por delante.

El acto consistió en una ceremonia de carácter privado, siendo el asistido por el capellán Padre Carpena. Así pues, el club grana no faltó a su cita en una visita que ya es tradicional antes de encarar la nueva temporada.