La mayoría de los jugadores descartados el pasado verano por el Real Murcia no se enfrentarán a los granas en esta nueva temporada. Salvo Marcos Legaz, que ha encontrado acomodo en el Lorca Deportiva, y Peque, que firmó por la Balompédica Linense en los primeros días del mercado, el resto de futbolistas que no entraron en los planes de Adrián Hernández han tenido que bajar una categoría, al no encontrar destino en la división de bronce.

Albert Rodríguez, que rescindía su contrato firmado hasta junio de 2021, forma parte de la plantilla del Pulpileño, donde volverá a compartir vestuario con Juanra. Al Mar Menor de Javi Motos se ha ido Quereda. El canterano, que el pasado mes de enero pasaba a tener ficha con el primer equipo, fue descartado por el Real Murcia en junio. Finalmente ha acabado de nuevo con Motos, entrenador que le hizo titular en el Imperial.

Manolo, por su parte, se ha sumado al proyecto del Racing Murcia y Antonio Escribano, que también rescindió el año de contrato que le quedaba, se ha comprometido con Los Garres. El último en encontrar destino ha sido Julio Algar. El central esperaba a las últimas horas del mercado para elegir su nuevo club. Al no encontrar hueco en Segunda B, el zaguero ha pasado a formar parte de la plantilla de La Unión.

Lejárraga, sin equipo

Por último, el meta Lejárraga, que rescindía su contrato el último día de mercado, se ha quedado sin equipo. El madrileño está en el paro y podría comprometerse con cualquier club que tuviera una ficha libre.