El murciano Alejandro Valverde solo pudo ser octavo en el Campeonato del Mundo en ruta que ganó el francés Julian Alaphilippe, digno sucesor del danés Mads Pedersen en un duro circuito en la ciudad italiana de Imola. El ataque realizó el galo en la última subida, donde Valverde, campeón en 2018 se quedó cortado, resultó determinante después una galopada en solitario del esloveno Tadej Pogacar, flamante ganador del Tour de Francia 2020.

Valverde hizo examen de conciencia tras la prueba: «En la última subida, el ritmo ha sido muy fuerte y yo he pecado de prudente. Pensaba que iba peor y luego he ido remontando y cuando he llegado a Mikel (Landa) he visto que los primeros han coronado a 7 u 8 segundos», desveló el 'Bala', que suma siete medallas, una de oro, en los Mundiales de ruta. El octavo puesto supone el undécimo 'top 10' de su carrera deportiva, en la que también tiene dos medallas de plata y cuatro de bronce. Valverde, de todos modos, quiso dejar claro que la selección española, a pesar de no haber subido al podio, «ha estado muy bien». «En la parte final, hemos estado lo más atentos posibles. Mikel ha estado superbien y Luisle (Sánchez) -acabó en el puesto 52- nos ha llevado muy bien colocados en el tramo final», añadió.

Alaphilippe estaba señalado como uno de los favoritos junto al belga Wout van Aert y esta vez, en una carrera tan imprevisible como suele ser esta, sí se confirmaron los pronósticos con el corredor del Jumbo-Visma colgándose la plata, la segunda tras la lograda el viernes en la crono. El bronce fue para el joven suizo Marc Hirschi (22 años de edad).

El de Saint-Amand-Montrond, en plena madurez ciclista (28 años), supo cuándo atacar y luego echó el resto en los kilómetros finales para convertirse en el primer francés en enfundarse el maillot arco iris desde que en 1997 lo lograse en San Sebastián su compatriota Laurent Brochard, una edición donde Francia hizo doblete con el título en contrarreloj de Laurent Jalabert. Nadie pudo responder a Alaphilippe, experto corredor de pruebas de un día, y la decena de segundos que logró amasar le valieron.