La carta de presentación del UCAM Murcia CB en la primera jornada de la Liga Endesa fue la peor posible, porque la imagen ofrecida en Andorra generó algo más que dudas entre los aficionados. Sin embargo, el conjunto universitario ha sabido -por él mismo- cómo reconducir la situación en apenas unos días. Y es que, anoche, en un Palacio de los Deportes vacío por las restricciones sanitarias ante el coronavirus, la actuación del UCAM estuvo más acorde a lo ofrecido y esperado durante la pretemporada. El equipo murciano superó al Movistar Estudiantes (90-83) sacando a relucir sus puntos fuertes, y a base de trabajo colectivo en las dos canastas, amarró la que ya es su primera victoria en la Liga Endesa.
Los de Sito Alonso supieron mantener a raya al cuadro madrileño, mantener los nervios cuando se acercaban en el marcador y resolver los problemas cuando aparecían. Con Conner Frankamp desatado en varias fases clave, con 24 puntos y cuatro asistencias, y un Emanuel Cate que ayer sí que supo dar ese paso adelante que se le lleva reclamando, con 18 puntos y 6 rebotes, sobre todo en la primera mitad, el UCAM neutralizó a un Estudiantes que no pudo sacar a relucir todo su arsenal ofensivo y que se cargó de pérdidas bien por la defensa local o bien por errores propios.
La primera entrada de aire fresco en el equipo murciano llegó desde el quinteto inicial. Sito Alonso no puso todas sus armas primarias desde el principio. Pero sí que encontró el equilibrio en ataque con la entrada de Jordan Davis y David DiLeo. La amenaza exterior del ala-pívot permitió abrir mucho más el campo para que Lima y el propio Davis -con más espacio para entrar- anotasen las primeras canastas por dentro. Conner Frankamp, a la contra pasándose el balón por la espalda inaugurando el repertorio de highlights que dejó anoche, siguió anotando y dos triples de DiLeo permitían a los murcianos tomar la primera ventaja 11-5. La intensidad en defensa del UCAM -presionando en todo momento- también era palpable tanto frenar a las amenazas exteriores del Movistar Estudiantes como el juego interior. Tan solo Djurisic, en la pintura, lograba sacar petróleo (16-9). La seguridad atrás y el control, con algunos problemas, en el rebote permitían al UCAM salir pronto a la contra y así fue como tomó ventaja en el primer cuarto. Además, la buena lectura en el pick and roll de Cate también se tradujo en puntos (24-15).
La buena conexión entre DJ Strawberry y el pívot rumano seguía dando sus frutos durante el inicio del segundo cuarto. Sin embargo, el Movistar Estudiantes reaccionó pronto gracias a dos triples de Roberson (28-23), y fue entonces cuando aparecieron los primeros problemas serios para los de Sito Alonso. Y es que, a pesar de dominar el rebote ofensivo, el conjunto universitario no terminó de finalizar en canasta varios ataques seguidos, lo que llevó a encajar un parcial de 5-11 que puso a los de Javier Zamora muy cerca de su rival después de contar con hasta 11 puntos de desventaja en el primer cuarto (35-34). Segundos más tarde, otra gran acción de Frankamp sirvió para mantener el leve colchón local, a pesar del empeño ofensivo de Djurisic, y dos tiros libres de Cate colocaron el definitivo 39-36 con el que se llegó al descanso.
El UCAM necesitaba recuperar la intensidad y el rebote del primer cuarto para no sufrir en la segunda mitad, y así fue. Pese a que el tercer cuarto fue muy trabado, con mucho tiempo de duración por las interrupciones, era el momento de mantener la cabeza fría y las manos calientes cuando se agarraba el balón. Y así fue, porque el equipo de Sito Alonso supo aprovechar las numerosas pérdidas del Movistar Estudiantes para castigar a su rival e incluso elevar la máxima ventaja. Lima, con algunos problemas físicos, aguantó sobre la pista hasta que el UCAM consiguió despegarse del estudiantes (48-40). Frankamp, con su exquisito manejo de balón y toma de decisiones con campo abierto, antes de explotar desde el triple en el último cuarto, terminó por 'matar' a los de Javier Zamora.
El partido se rompió definitivamente después de una antideportiva de Jackson tras una falta de Rojas (50-42). A partir de ahí, el equipo murciano estuvo mucho más enchufado, con un ataque más equilibrado y neutralizando los puntos de Avramovic o Roberson. Además, la presencia de Emaneul Cate de nuevo en la pintura, muy entonado en este partido, permitió castigar todavía más a los estudiantiles antes de encarar la fase decisiva del encuentro (70-57).
El UCAM firmó un parcial de salida en el último cuarto de 4-0 que obligó pronto a pedir tiempo muerto a Javier Zamora. Respondió rápidamente Edwin Jackson con dos triples consecutivos, y fue entonces Sito Alonso el que tuvo que cortar el partido (77-65). Sin embargo, cuando el Movistar Estudiantes se lanzó de lleno a la desesperada a por la victoria elevando la presión en defensa y sacando a relucir sus virtudes en ataque, fue cuando apareció la mejor versión de los puntos fuertes del UCAM. Un desatado Conner Frankamp desde el triple, con 24 puntos y 4 asistencias al término del encuentro, cortó de raíz cualquier esperanza visitante para conservar la ventaja psicológica de los diez puntos en varios momentos clave (82-72). El UCAM aprovechó su inercia positiva hasta el tramo final, y así consiguió la primera victoria del curso que devuelve la confianza al plantel tras la mala imagen del domingo en Andorra (93-80). Los universitarios recibirán mañana al Iberostar Tenerife en el Palacio, a las 17.00 horas ( Movistar +) en el duelo de la jornada 3 de la ACB.
