El considerado por muchos como la 'joya' del tenis español, el murciano Carlos Alcaraz, de solo 17 años, viajó ayer a París con muchas expectativas para disputar la fase previa de su primer Grand Slam, Roland Garros, de la mano de su entrenador, el exnúmero 1 del mundo, Juan Carlos Ferrero.

El tenista llega a Francia con la mente puesta en superar los tres partidos de la fase previa para entrar en el cuadro final del torneo, lo que sería un nuevo hito en una prometedora carrera después de que con 14 años se anotara su primer punto ATP y de que el pasado febrero (con 16 años) en Río de Janeiro ganara su primer partido del circuito profesional al también español Albert Ramos.

«Hacía mucho que no salía alguien tan joven, tan polivalente y que apunte tan alto: yo creo en el potencial que tiene», expresó Ferrero en una entrevista concedida a EFE en su academia JC Ferrero Equelite Sport Academy de Villena tras dirigir un entrenamiento de Alcaraz, de quien ve posibilidades para que algún día conquiste la copa de los Mosqueteros, en París.

Por su parte, Nadal arrolló ayer en su regreso a la competición a Pablo Carreño con un contundente doble 6-1 que le permite avanzar a octavos del Masters 1.000 de Roma. El de Manacor se impuso con superioridad a su rival en un enfrentamiento en el que tras seis meses y medio volvío a disfrutar de la competición.