Llegado septiembre, el Real Murcia está muy lejos de la cifra de abonados lograda hace solo un año. Los doce mil carnés vendidos se antojan ahora más un sueño que una realidad, sin embargo, pese a todos los obstáculos que está generando la crisis sanitaria provocada por el coronavirus, los murcianistas ya han logrado que cuatro mil aficionados reserven su butaca en Nueva Condomina para la campaña 20-21. Ni el riesgo de que la competición pueda disputarse sin público en las gradas ha sido un impedimento para que los más fieles acudan a las taquillas del estadio murciano para confirmar su 'matrimonio' con la entidad centenaria.

El martes a última hora el Real Murcia utilizaba sus redes sociales para anunciar que ya se había superado la barrera de los cuatro mil abonados. El ritmo de venta no está siendo tan alto como se esperaba, aunque la crisis sanitaria actual no facilita las cosas. La cifra está muy lejos de las logradas en los últimos años, sin embargo en el club grana se espera que, una vez conocido que habrá competición y que esta comenzará el 18 de octubre, en los próximos días se produzca un estirón en los carnés comprados.

La campaña de abonados se lanzaba a finales del mes de julio. El pasado 29 de agosto, el Real Murcia informaba que ampliaba el plazo para que los abonados puedan mantener su butaca. Este periodo estará abierto hasta el próximo 15 de septiembre.

El precio en Tribuna Preferente es de 200 euros. En los fondos el carné tiene un precio de 95 euros. El club ofrece distintos descuentos si los interesados se ajustan a algunas de las modalidades ofertadas.

De momento se sabe que la competición comenzará el 18 de octubre, pero hay pocas probabilidades de que los primeros partidos de la temporada 20-21 sean abiertos al público.