El retorno del Fútbol Club Cartagena al fútbol profesional debía ir acompañado de una serie de cambios en la plantilla con respecto a la que ya ha pasado a la historia del club por lograr el ascenso hace menos de un mes y medio. Unas modificaciones que ya se están produciendo y que conforme avanzan los días dejan menos espacio a los futbolistas que visten la albinegra desde la temporada pasada -incluso antes- y abren la puerta a jugadores que llegan con la intención de ser importantes en el proyecto que consolide a la entidad y al club en la categoría de plata. Sin embargo, a diferencia de ese discurso que se suele repetir cuando un equipo llega a Segunda en el que parece imprescindible amarrar jugadores veteranos y con mucha experiencia, el Cartagena está optando, por el momento , por el potencial y la proyección que se puede extraer desde la juventud y el desparpajo.

Es algo que queda patente con las incorporaciones que se están haciendo de medio campo hacia adelante, donde jugadores como Nacho Gil (24) o Simón Moreno (23) han dejado patente su calidad y valía en los dos amistosos disputados hasta el momento frente a Villarreal y CD Leganés. Mismo síntoma dejan las vueltas de William de Camargo (21) y de Álex Martín (22), que regresan con la plena confianza del entrenador después de lo demostrado en la última campaña. No es distinta la fórmula aplicada desde la dirección deportiva en el centro del campo, que es posiblemente la parcela del terreno de juego mejor encaminada en el equipo que Borja está armando.

Joven talento con quilates

«No creo que la edad sea algo que debamos valorar. No pienso que deba ser la vara de medir que tenemos que usar para saber si un jugador está preparado para la categoría o no. Puedes tener un jugador de 30 años sin experiencia en Segunda y otro con 21 que haya jugado dos partidos en Primera División. No es determinante». Eran las palabras que utilizaba el técnico abulense en La7 para referirse al instinto que les está guiando en este mercado a la hora de firmar futbolistas. Y es algo que define a la perfección la situación actual de la medular. Han sido varios los jugadores que en estas primeras semanas se han anunciado para incorporarse al medio, que están marcadas por la juventud.

El ejemplo más claro es el de Sergio Lozano. El futbolista cedido por el Villarreal solo tiene 21 años y ya había debutado con el primer equipo del submarino amarillo la temporada pasada. Desde el momento que se ha puesto la elástica del Cartagena, ha sido capaz de echarse el equipo a la espalda en los dos amistosos disputados hasta el momento sobre el césped de Pinatar Arena, siendo de hecho uno de los jugadores que más minutos han acumulado de toda la plantilla. Lo ha hecho, además, con la personalidad suficiente como para haber pasado sobrado el aprobado y ganarse la confianza del cuerpo técnico.

Una línea superior, incluso, es la que se dibuja con el fichaje de Pablo Clavería (24). El centrocampista madrileño llega del Fuenlabrada después de haber sido uno de los jugadores más destacados de un conjunto que ha estado peleando hasta el último momento por meterse en el play off de ascenso a Primera División. Más de 30 partidos esta campaña y varios en Primera, le hacen poner los pies en Cartagena con las perspectivas claras de ser uno de los jefes que manejen el equipo desde el medio. Y no por llevar más tiempo y no ser 'novedad' es menos importante la presencia de Carrasquilla. El panameño tiene ante sí la oportunidad de dar un importante salto en su carrera que se corresponda con las altas expectativas que hay puestas sobre su figura. Con una posición más adelantada que la temporada pasada (está apareciendo por detrás del punta, jugando con mucha más libertad en el ataque y siendo el primero en iniciar la presión detrás del referente arriba), 'Coco' pretende volver a ser el motor del Cartagena en un centro del campo que no va nada mal encaminado.

No iba a ser todo, sin embargo, juventud y proyección. José Antonio Verza, que el año pasado bajó un escalón hasta Segunda B para «tratar de volver al fútbol profesional con impulso», regresa a la categoría en la que ha jugado gran parte de su carrera. A pesar de la irregularidad mostrada en ciertos tramos de la última campaña, la experiencia que atesora un jugador como Verza puede serle muy útil a los albinegros. No pasó inadvertida su actuación frente al Villarreal en el primer amistoso del periodo de preparación.

Entre dos aguas

En la ecuación de este centro del campo quedan por despejar varias incógnitas. Por un lado, las que quedan por llegar. Por otro, las que están en el alambre, que no son otras que las de Miguel Ángel Cordero y José Ángel Jurado. «No son prioridades en lo que ha pedido el míster», comentaba Paco Belmonte durante la presentación de William de Camargo en referencia a algunos futbolistas de la plantilla. Su presencia en Cartagena para este curso pasa posiblemente por hacer una excelsa pretemporada. Mucho trabajo por delante para ambos si quieren seguir formando parte de un centro del campo que por el momento parece una buena sala de máquinas en el tren que quiere llevar al Cartagena a la permanencia.