Durante la temporada pasada, el origen de gran parte de los jugadores de la plantilla del Real Murcia era un orgullo para todos los aficionados al 'murcianizar' un proyecto austero y necesario para las arcas del club. Dieciséis murcianos formaban parte de la plantilla en el curso 2019-2020. Se apostó por el acento regional, con un entrenador de la casa, para intentar lograr los objetivos marcados durante esa campaña. Y, aunque no empezó bien el experimento, los de Adrián Hernández empezaron a carburar y antes del parón quedaron octavos, puesto que les da derecho a participar en la siguiente Copa del Rey sin necesidad de pasar por la Copa Federación.

La dirección deportiva del club ha cambiado el rumbo en este curso y no va a seguir apostando por el producto regional de una manera tan estricta, aunque es cierto que habrá que esperar pues el mercado sigue abierto y habrá más salidas y más entradas. Si no hay giros inesperados en el guion del mercado estival, este año el equipo grana 'solo' contará con siete murcianos en sus filas. Sigue siendo un número bastante aceptable pero se queda en menos de la mitad que el curso pasado.

Las salidas de Alberto Rodríguez (Lorca), Manolo (Bullas), Quereda (Murcia), Alejandro Martínez 'Peque' (Albudeite) y Juanra (Algezares) dejan al conjunto grana con cinco jugadores menos con sello regional. De todos ellos, ninguno fue clave en los esquemas de Adrián Hernández. A esos futbolistas hay que sumarle más jugadores que están en la rampa de salida y que también alterará el número de jugadores locales en la plantilla. Antonio Escribano (Murcia) no seguirá y está buscando equipo. El canterano Josema (Mula), que se encuentra ultimando su salida al Espanyol de Barcelona por un precio que rondará 50.000 euros, también abandonará el Real Murcia. En la misma situación se encuentra Víctor Meseguer (Alguazas), una de las sensaciones de la temporada y que ha sido pieza clave para su entrenador. En invierno se le hizo ficha del primer equipo, pero con una de las nóminas más baratas de la plantilla. El Mirandés tiene todas las papeletas para hacerse con sus servicios.

Armando (Santiago y Zaraiche), por su parte, ha optado por cambiar de aires. Con dos años más de contrato, ha decidido abandonar el Real Murcia, al que ha pertenecido durante de seis temporadas, y cerrar así una etapa donde ha llegado a ser el capitán del equipo. Las aspiraciones del club no coinciden con las suyas personales y arrancará un nuevo proyecto en el Hércules de Alicante, desde donde llega a cambio Yeray, un centrocampista que viene de ser uno los jugadores más importantes en la desastrosa temporada de los alicantinos, que estaban en puestos de descenso antes del parón por el coronavirus.

Los murcianos que siguen en la plantilla son los dos centrales, Edu Luna (Puente Tocinos) y Antonio López (Puerto Lumbreras), ambos clave para Adrián tanto en la defensa de cuatro o de cinco; Iván Pérez (El Palmar) también ha sido un fijo en la banda izquierda; Juanma (Cabezo de Torres), uno de los más queridos de la afición y con más potencial de la plantilla; el extremo Javi Pedrosa (Puente Tocinos); y Rafa Chumbi (Águilas), este último tras bajarse la ficha y ampliar un año más su contrato, siguen en las filas del Real Murcia. La única incorporación murciana de este curso ha sido Youness Lachhab (El Palmar). El centrocampista hispanomarroquí vuelve al club después de firmar con el Almería en la 17-18.

Desde el Real Murcia lo tienen claro. Se avecina una temporada clave en el devenir del club, con la inclusión de la Segunda B Pro, y se han dejado el sentimiento de pertenencia en casa. La directiva, al menos este curso, deja de lado la 'murcianización' de la plantilla.