La Real Federación Española de Fútbol ha tomado cartas en el asunto en el 'caso Lorca Deportiva'. El organismo que preside Luis Rubiales ha decidido abrir un expediente informativo al nuevo club de Segunda División B, que se arriesga a una fuerte sanción por ocultar que un miembro de su cuerpo técnico dio positivo por coronavirus la semana pasada. Aunque las fuentes consultadas por esta Redacción no supieron precisar el castigo que le puede caer a la entidad de la Ciudad del Sol, ya que no existen precedentes, varias sí que precisaron que la infracción cometida por el club que preside Hugo Issa podría llegar a considerarse como un delito contra la salud pública, tipificado en el Código Penal. En cualquier caso, es una incógnita qué decisión tomará la Federación Española, que ayer requirió documentación al club tras nombrar juez instructor. El Lorca Deportiva no quiso pronunciarse públicamente sobre el asunto pero sí expresó su confianza en que se archive el caso y todo quede en un pesadilla.
La RFEF anunció su decisión con el siguiente comunicado: «La RFEF ha abierto un expediente disciplinario informativo al Lorca Deportiva a propósito de las informaciones sobre el caso de positivo por coronavirus relacionado con el cuerpo técnico de su primer equipo y del que en ningún momento han sido informadas por parte del club ni la Federación Española de Fútbol ni la Federación Murciana. En este escenario, en coordinación con las autoridades sanitarias murcianas, se aplicarán las medidas oportunas relacionadas con este tipo de alertas sanitarias en el deporte», dijo.
La Federación Murciana, por su parte, también ha tomado cartas en el asunto. Al margen de realizarse ayer test del coronavirus a todos los trabajadores de la territorial que estuvieron el pasado sábado en Pinatar Arena en el encuentro por el ascenso a Segunda B que acabó con empate en el marcador, ha llamado a todos los componentes del Lorca Deportiva y Atlético Pulpileño para que esta tarde acudan al estadio Artés Carrasco, a partir de las cinco de la tarde, para someterse a los test con el fin de determinar si hay algún infectado. De todas formas, varios de los integrantes de las plantillas ya han dado el paso de realizarse los mismos con el fin de salir de dudas.
El caso ha generado un tremendo malestar en los implicados, considerándose una temeridad la acción del Lorca Deportiva de ocultar la información dada la situación que se vive y después de todo lo acontecido con el Fuenlabrada. «Sigo asombrado por todo lo que está pasando», comentó ayer Mariano Muñoz Coronado, presidente del Pulpileño, en declaraciones a este diario. «No entiendo cómo narices un equipo tan referente como el Lorca Deportiva no manifesta a la Federación lo que está pasando. Ahora dicen que fue el domingo cuando conocieron el positivo, pero no es así porque lo sabían desde el jueves o el viernes antes del partido. Tienen que decir la verdad», expresaba el máximo mandatario del club de San Miguel de Pulpí.
La situación ha provocado que los jugadores del Pulpileño hayan tenido que dejar de ir a sus puestos de trabajo «porque están todos con mucho miedo. Las empresas les han dicho que no pueden ir a trabajar hasta que no se hagan los test y salgan los resultados de los test». A Muñoz no le llamó la atención que no se realizaran test antes de la final y sí previo a las semifinales: «No me llamó la atención. Nosotros nos hicimos dos test con la Federación, cuando iniciamos los entrenamientos y antes del partido de semifinales. Nuestros jugadores no hicieron vida normal porque iban de sus casas a los entrenamientos. El Lorca Deportiva tenía que haber comunicado que la semana pasada varios de sus futbolistas habían tenido síntomas como faringitis, pero ocultaron todo», precisó Muñoz, quien considera que «la mayor victoria en este caso será que ninguno de los jugadores está infectado».
