Una de las novedades de cara a la próxima temporada en la campaña de abonos del Real Murcia será el cierre de la Grada Lateral. Los aficionados granas que contaron con su carné en esa ubicación del estadio la temporada pasada deberán 'mudarse' a otra zona después de conocerse ayer, en la presentación de la nueva campaña, que permanecerá cerrada al público durante la campaña 2020-21. El club murcianista quiere ahorrar, principalmente, los costes de apertura en cada encuentro de liga -unos 2.000 euros según anunciaron ayer- y aprovechará para intentar explotar esa ubicación con fines comerciales. Una fórmula que ya se intentó sin éxito alguno años atrás, dejando la que es la 'grada televisiva' en el fútbol profesional completamente desierta.

No obstante, desde el Real Murcia dejaron la puerta abierta a utilizar la Grada Lateral de forma habitual si las recomendaciones sanitarias por el coronavirus así lo recomiendan para mantener siempre la distancia de seguridad, en caso de que se puedan disputar con público los encuentros ante la crisis por la pandemia. Así pues, los aficionados que en los últimos años retiraban su carné en esta zona del estadio murcianista, deberán buscar otra acomodación.

Otra de las dudas que surgieron ayer a los aficionados del Real Murcia ante la 'obligación' de tener que cambiar de ubicación fue la de las placas de los asientos. Varios seguidores optaron por poner su nombre a la butaca en la anterior campaña de abonados por un coste de unos 10 euros. Sin embargo, deberán abonar la misma cantidad si quieren trasladar dicha placa a su nuevo asiento en el estadio de cara a la temporada 2020-21, como se informa en las condiciones del abono.