Un partido como el del domingo, en el que Cartagena y Atlético Baleares se juegan el ascenso directo a Segunda División, es una de las mayores motivaciones que puede tener un futbolista de esta categoría tanto a nivel individual como colectivo. Encuentros en los que si hay un día que se puede decir más convencido que nunca aquello de que «solo importa el resultado», es sin duda este. Sin embargo, hay un jugador que -aunque lo haga de forma inconsciente- no podrá evitar tener en mente lo que suceda con el rival. El ex albinegro y -sobre todo- cartagenero, Arturo Rodríguez Pérez-Reverte tratará de impedir este domingo que 'su Cartagena' alcance el fútbol profesional: «El ascenso creo que sería un poco más amargo. No es lo mismo eliminar al equipo de tu ciudad, en el que has jugado y por el que te sientes representado, que a otro. Pero si no ascendemos, no será mucho más dulce. Al final, nosotros estamos aquí para hacer nuestro trabajo. Si asciende el Cartagena me alegraré, pero el mal sabor de boca no me lo va a quitar nadie», comenta.

El delantero acaba de terminar una de las sesiones de gimnasio que el Atlético Baleares está haciendo estos días para llegar a punto al encuentro. Nos atiende desde el hotel La Cala Resort de Mijas, lugar donde está concentrado el conjunto blanquiazul desde el martes. Tres días más que el Cartagena -que pone rumbo a Marbella en la jornada de este viernes- son los que van a estar en el hotel: «Cada uno ha tenido su forma de afrontarlo. El Cartagena prefiere viajar solo dos días antes y pasar aquí menos tiempo, mientras que nosotros llevamos más días. Personalmente, pasar cuatro o cinco días aquí me hace estar a gusto. Piensas en fútbol y te cuidas más. Es cierto que nosotros tenemos un condicionante claro, porque al tener que viajar en avión no nos la podíamos jugar a que ocurriera algún imprevisto relacionado con la pandemia y se retrasara el viaje. Pero hemos estado confinados muchos meses, por estar dos días más que menos no hay problema. Cinco días están bien», asegura.

Con el corazón 'partío'

Arturo se ve las caras frente al club de sus amores en unas circunstancias en las que no quería cruzarse. Así lo comentaba con Perico Arango, utillero del Cartagena y uno de los hombres del conjunto albinegro con los que mantiene el contacto. Sin embargo, el azar les ha puesto cara a cara y, como es lógico, los comentarios desde su entorno son inevitables: «Algunos amigos que son del Cartagena me dicen que no corra y que intente no marcar gol (risas). Entiendo que me lo digan, pero también quieren lo mejor para mí, que sería ascender y poder marcar. Lo ideal sería que ascendiéramos nosotros y al siguiente el Cartagena, así estamos todos contentos», comenta.

El ariete pasó por la cantera del club albinegro al comienzo de su trayectoria y llegó a entrenar con el primer equipo a las órdenes de 'JIM' antes de tener que buscarse la vida fuera. Tras pasar por La Unión, el filial del Getafe, La Roda, el Córdoba -con quien asciende a Primera División-, el Alcorcón, la Llagostera y el Dundee escocés, volvió al Cartagena en 2016. En el regreso a casa anotó 7 goles en liga y uno en Copa del Rey en los 39 partidos en los que saltó al césped. Ahora, se imagina lo que supondría marcarle un gol y quitarle un ascenso al equipo de su ciudad. No obstante, tiene claro que si marca lo celebrará: «Siempre he dicho que los goles hay que celebrarlos. No creo que la gente se tenga que sentir mal porque un jugador, y más un delantero, haga su trabajo. Creo que hay que mirar más el respeto que el jugador ha demostrado por el club. Siempre que se celebre desde el respeto y sin faltar a la afición, creo que es una manera de mostrar alegría por tu trabajo. Por mucho que yo te diga aquí que no lo voy a celebrar, si marco un gol en el 97 sería difícil pensar en no celebrarlo. Está claro que no sería igual que si lo marcara contra el Castellón, por ejemplo, pero sería difícil no celebrarlo», afirma Arturo.

Poco ajenos a todo lo que rodea al partido, al cartagenero comenta que han podido ver las declaraciones que su entrenador dedicaba a Borja a comienzos de semana: «Creo que es una frase que no se corresponde con lo que el míster piensa. Si lees la entrevista entera, ves que no es así. Simplemente pone un ejemplo de que no solo hay una forma de entrenar. Creo que se le está dando más importancia de la que realmente tiene y el que conozca a Mandiola sabe perfectamente que es su forma de hablar y que no tiene nada en contra de Borja», sentencia.