Se acerca el día del partido más importante de la temporada en Segunda División B. Después de una temporada atípica, en la que no se terminó la liga regular y se ha ido improvisando sobre la marcha todo lo que tiene que ver con la Segunda B, el Cartagena está a noventa minutos del ansiado ascenso al fútbol profesional tras quedarse con la miel en los labios en las últimas temporadas. El duelo, que tendrá lugar el próximo domingo 19 de julio a las 22.00 horas, ya va entrando en caliente debido a las declaraciones de Manix Mandiola, entrenador del Atlético Baleares, en una entrevista concedida a Elena García del Diario de Mallorca, perteneciente a Prensa Ibérica, el mismo grupo editorial de La Opinión de Murcia.

La historia de ambos entrenadores viene de la temporada pasada, cuando se enfrentaron en la final de Segunda B. Borja Jiménez, por entonces entrenador del Mirandés, le ganó la partida a Manix Mendiola apeándole del sueño de la Segunda División tras una muy disputada eliminatoria que finalizó con un 3-3 en el resultado global pero en el que los de Miranda de Ebro salieron beneficiados por los goles fuera de casa.

En la entrevista al Diario de Mallorca, Mandiola ataca duramente la forma de planificar los partidos que tiene Borja Jiménez, que declaró hace unas semanas que desde que salió el nombre del Atlético Baleares, han dedicado muchas horas a estudiar al rival en vídeo. «Este es el entrenador que dirigía al Mirandés el año pasado y por muchos vídeos que viera, si Vallori mete la ocasión que tiene en el último minuto ascendemos nosotros y los vídeos que puso no habrían valido una mierda», declara Mandiola.

El técnico del Baleares va más allá y también se acordó del breve paso de Borja por el Asteras Tripolis, en el que apenas estuvo cinco meses antes de su destitución. «Si tan bien funciona el sistema de vídeo que utiliza, lo podía haber aplicado en su última etapa en Grecia, que lo mandaron a casa echando hostias». Sin embargo, no se lo toma como una revancha personal contra Borja: «Si tuviera que enfadarme con toda la gente que me ha ganado, estaría enfadado con medio mundo».

Empieza la semana más importante de la temporada para ambos equipos y el ambiente, como es de costumbre y, en el que ni esta situación excepcional que vivimos puede controlar, tiende a caldearse. Mandiola ha sido el primero en pronunciarse, pero es probable la réplica, quizá con un poco más de elegancia, llegue desde Cartagena.

El entrenador vasco no tuvo reparo en admitir que de los tres posibles rivales que quedaron primeros tras las veintiocho jornadas de la temporada regular -Cartagena, Logroñés o Castellón- el «rival a evitar era el Cartagena. Es el equipo que mejor plantilla tiene, con todas las posiciones muy bien cubiertas», declara.

En agosto de 2019, la pasada pretemporada, ya se vieron las caras los dos conjuntos en Pinatar Arena en un amistoso. El Cartagena, por entonces entrenador por Gustavo Munúa, se impuso 3-2. Al ser preguntado si servía de algo ese partido, Mandiola lo tiene claro: «No sirve de nada. En pretemporada no fuimos capaces ni de ganar a un equipo de Tercera en casa. Si le digo la verdad, ni me acordaba de que jugamos contra el Cartagena en verano. Luego, cuando me lo dijeron, algo relacioné», manifiesta el vasco.

Aparte de hablar de las tácticas de Borja Jiménez y del Cartagena, Mandiola trató todos los temas que ha supuesto el Covid y el parón para su equipo. «Antes del parón, estábamos en un mal momento, con dos derrotas consecutivas y con muchas bajas. Esto no le ha venido bien a nadie pero nos veo bien para competir. Nos ha servido para contar prácticamente con todos los futbolistas», afirma. Sin embargo, con el Ibiza pisándole los talones y a pesar de la dinámica descendente que llevaban, Mandiola pone un diez a su temporada. «Si al primero no le pongo un diez, imagínese qué nota le puede quedar al último».

El formato que ha decidido la RFEF de jugar a partido único en sede neutral no le disguta en absoluto. «Es la decisión que han tomado y ya está. Veo justo el sistema de ascenso que se ha programado. Lo único malo, que para nosotros es muy importante la afición. Aunque quizás es el formato que mejor nos vaya, porque de la otra manera ya se ha visto que nos quedamos fuera aguantando las celebraciones del rival en nuestra propia casa», indica sobre lo que considera un formato atractivo para el espectador.

Manix Mendiola, un tipo que no comulga con las nuevas tecnologías y no solo se refiere a analizar al rival mediante vídeos, sino que tampoco apoya la figura del VAR. «No soy muy partidario de cómo se están dando las cosas con el VAR, pero bendito probkema si jugamos con él. significaría que estamos en Segunda División».

Ambos equipos se encuentran a noventa minutos del sueño del fútbol profesional, de salir del pozo de Segunda B. Ambos darán lo máximo en un partido tan atípico como emocional, donde los 22 jugadores saben que lo tienen ahí, tan cerca. Nos espera una semana de emociones en las dos ciudades.