Donde no llega el dinero hay que apelar a las emociones y los sentimientos. Eso ha hecho el UCAM Murcia CB con su nueva campaña de abonados para la próxima temporada, que nace con infinidad de cuestiones por resolver y que aún no pueden responder ni el club ni las autoridades sanitarias, que serán las que marcarán los pasos a seguir en los próximos meses. ¿Se podrán celebrar partidos con público y qué distancia tendrá que haber entre cada espectador?, es la pregunta que se hacen casi todos los aficionados. Aunque para responder a esa cuestión aún falta un tiempo, todo indica que sí habrá público. Esta limitación no ha impedido a la entidad universitaria diseñar ya una campaña donde hace un guiño a los abonados del pasado curso, aunque sin llegar a alcanzar con el descuento aplicado la pérdida originada por los partidos no disfrutados por el coronavirus.

Cuando la campaña se interrumpió en marzo, al UCAM le restaban por jugar siete partidos en casa, es decir, un 40%. Para tratar de compensar la pérdida, la entidad aplicará un 15% de descuento sobre el precio del carné de la próxima temporada, una promoción a la que unirá cuatro entradas a elegir durante la campaña exceptuando los partidos ante el Barça y el Real Madrid. Quien quiera también puede renunciar al descuento como ayuda al club por la pandemia o canjear esa cantidad por productos de merchandising.

Los precios que regirán la próxima campaña están congelados con respecto a la tarifa más barata de la pasada. Para los adultos el carné cuesta 310 euros en central pista y baja (265 con el descuento), 275 en lateral pista y baja (230), 180 en grada alta (150), 200 en curvas (170), 150 en fondos (125) y 100 en fondos (85). Como todas las temporadas habrá descuentos para abonados infantiles, jóvenes y jubilados. Además, el club reservará el asiento del abono actual, que puede experimentar alguna ligera variación de ubicación en la grada por motivos sanitarios, hasta el 1 de agosto, y el precio será el mismo durante toda la campaña. Los más rápidos en adquirir su carné será a los primeros que se ubicará. Aunque aún es pronto para saber qué escenario estará activo cuando en octubre comience la nueva temporada, en el club ya hay previsión de que quizás se tenga que arrancar con solo un 50% del aforo del Palacio, es decir, poco más de 3.500 aficionados. «Temporalmente se irá aparcelando el aforo», declaró José Miguel Garrido, director de marketing, quien hizo hincapié en la «situación de anormalidad» que se vivirá de forma transitoria. El club, en cualquier caso, garantiza que «los abonados que no puedan acceder al pabellón por limitaciones sanitarias, recibirán diferentes opciones de compensación por cada partido no disfrutado» y que no «se perderá el importe pagado».

Garrido también invitó a todos los abonados que estén pasando por dificultades económicas por las consecuencias del coronavirus a que pongan sus casos en conocimiento del club para «buscar soluciones con el fin de que nos sigan apoyando», mientras que también precisó que se están buscando fórmulas para poder pagar a plazos del abono -en la actualidad se hace en dos partes, la primera a la reserva y la segunda antes del inicio-.