Alejandro Valverde, Mireia Belmonte, Lydia Valentín y Saúl Craviotto, todos ellos deportistas vinculados a la Universidad Católica San Antonio, así como componentes de las plantillas profesionales de fútbol y baloncesto, como Sadiel Rojas, Jarrrel Eddie, Sito Alonso, Rafa de Vicente y Adán Gurdiel, son los protagonistas de una campaña para conseguir recursos económicos para Cáritas. El video #CadaGestoCuenta se suma a la campaña #LaCaridadNoCierra.

El secretario general de Cáritas, Juan Antonio Illán, ha mostrado "agradecimiento hacia la UCAM, siempre dispuesta a ponerse al servicio de la sociedad murciana y los retos sociales que presenta". El impulso económico que pretende la campaña "permitirá llegar mejor y a más personas que en momentos complejos como los que vivimos no disponen de recursos propios ni de una red familiar y social que les permita afrontar su día a día con garantías".

José Luis Mendoza García, director de Relaciones Institucionales de la UCAM, destaca que la Universidad no podía permanecer ajena a esta situación tan dramática: "Cuando parecía que llegaba una recuperación sanitaria llega este tsunami que deja a miles de familias sin trabajo y sin recursos económicos. Cáritas está en primera línea de batalla y desde la UCAM y los clubes no podemos hacer otra cosa que acompañar y apoyar esta labor urgente de la Iglesia".

Ante la crisis sanitaria y social, Cáritas centra sus esfuerzos en cuatro ejes en la Región de Murcia. El primero de ellos es la información, orientación, ayudas y seguimiento a las personas en situación o riesgo de exclusión social mediante visitas presenciales, llamadas telefónicas y videollamadas. Puesta en marcha de la Central de llamadas 868 043 849 para la coordinación y gestión de nuevas demandas de ayuda.

En segundo lugar está la cobertura de las necesidades básicas de alimentación e higiene para las personas y familias vulnerables, ampliando la cantidad de productos, el horario y el equipo humano de los 170 centros de Cáritas en la comunidad.

Alojamiento adecuado y seguro para las personas sin hogar con apoyo psicosocial 24 horas y abastecimiento de productos de alimentación, higiene y salud en su red de albergues, casas de acogida y residencia, es otro de los pilares.

Por último, el refuerzo educativo a los menores de edad acompañados por Cáritas en la Región de forma previa al COVID-19 para que continúen su desarrollo educativo con el apoyo de educadores sociales y voluntarios disponiendo de recursos materiales y tecnológicos en sus hogares.

Las primeras estimaciones cifran el aumento de familias atendidas por Cáritas en un 23% con respecto al mismo periodo del año anterior. Los servicios diarios de comida elaborada y reparto se han incrementado un 54%. Se ha ampliado un 80% el horario de los economatos para garantizar las medidas de seguridad de las personas y la cobertura de la demanda. Las plazas de acogida residencial para personas sin hogar presentan un 54% de incremento.