Hablar de Laura Gil es hablar de títulos y medallas. Y es que la murciana se ha convertido en los últimos años en una coleccionista de éxitos el baloncesto femenino, sobre todo con la selección española. Sin embargo, una vez aplazados los Juegos Olímpicos de Tokio al verano de 2021 por la crisis del coronavirus, y a la espera de lo que suceda con la reanudación del tramo final de la Liga Femenina de nuestro país, Laura Gil deberá esperar un poco más para seguir añadiendo líneas a su ya extenso palmarés cuando está a punto de cumplir los 28 años. «La verdad que no soy preparadora física, pero como mínimo necesitaremos un mes para volver. Podremos realizar ejercicio, pero realmente estamos en casa sin salir. Hay que tiene la suerte de contar con terrazas amplias pero en mi caso no es así. Intento pasar el tiempo trabajando de la mejor forma posible, pero a la hora de competir de tener que hacer cambios de ritmo... para todo eso vamos a necesitar un mes», dijo ayer la murciana a una pregunta de los lectores de La Opinión durante el directo a través de Instagram.

La pívot del Perfumerías Avenida repasó desde sus inicios en el baloncesto hasta su rutina diaria durante el confinamiento en la conocida red social junto a Dioni García, Jefe de Deportes de La Opinión. «Entreno lo que puedo en el salón de casa, lo que todo el mundo hace en las redes sociales. La preparadora física del equipo nos manda algo muy parecido», comentó la murciana y añadió que «intento no acostarme muy tarde para poder ir con el día, porque sino se van un poco las horas. Me levanto, entreno, después estudio y ya es la hora de comer. Por la tarde tengo algo más de libertad para estar con el móvil o hacer cualquier cosa». La jugadora de Santo Ángel, quien está estudiando Psicología de manera online en la UCAM, consiguió conquistar la Copa de la Reina con el Perfumerías Avenida unas semanas antes de que se desatara toda la crisis por la transmisión del COVID-19 y estaba atravesando uno de los mejores momentos de forma. «Este año sí que he explotado otras facetas del juego. Antes estaba intentando demostrar que podía hacer algo más que defender, y ahora me he dejado llevar un poco más en la toma de decisiones en ataque», explicó Laura Gil en el directo de Instagram y añadió que «estos últimos años sí que se me está dando algo más de valor a mi juego. Al final, es algo que forma parte de mí, no lo hago ni por reconocimiento ni por intentar ganar más minutos. A veces en los entrenamientos me dicen que afloje un poco, pero es que no sé entrenar de otra manera. Me considero una jugadora de intangibles, eso no depende de que un día estés más acertada, así que intento darlo todo porque hay aspectos del juego que no son negociables y no dependen de la suerte».

Silvia Domínguez, compañera y amiga

Durante la conversación con Laura Gil también estuvo muy presente Silvia Domínguez, compañeras tanto de equipo como en la selección y que también envió comentarios durante la conversación. «Ella es el prototipo de base de siempre. Está pendiente de todo el equipo, intenta que todas sumen y que podamos tener esa conexión para jugar bien», añadió. Además, también desveló sus platos preferidos tras la pregunta de un lector. «Me encanta la tortilla de patatas, un buen cocido, la paella... soy de buen comer, y si encima es casero mejor todavía», dijo.

Laura Gil también respondió a la posibilidad de poder ir algún día a la WNBA. «No es algo que especialmente me llame la atención, pero tiene que ser una experiencia increíble. Pero en realidad yo no he podido dedicar un verano entero en los últimos años para entrenar y me gustaría seguir mejorando varios aspectos. Pero, si alguna vez llaman a mi puerta, seguramente sí que escogería esa opción», concluyó ayer la murciana a través del Instagram de La Opinión.