Tras cosechar la primera derrota desde que dirige el banquillo universitario, Asier Santana mostró unidad ante los medios de comunicación y dejó claro que está a una con la plantilla: «Los jugadores han seguido perfectamente el planteamiento que yo había ideado para el partido, pero es verdad que la estrategia no ha salido bien, aunque no tengo miedo de volver a fallar». Además, ha querido remarcar el punto de inflexión que supuso en el encuentro el segundo tanto de los granas justo en el momento en el que más cómodos se encontraban los suyos. «Cuando parecía que le cogiamos el ritmo al partido y empezábamos a ser más dominantes, nos han metido el segundo», declaró.

El técnico vasco destacó también la falta de acierto de su equipo hacia portería rival, reflejada en los dos balones al palo que estrellaron en la segunda mitad: «Es verdad que nos ha faltado acierto de cara a portería en algunos momentos clave del partido, y eso ha decidido el encuentro».

Un planteamiento fallido

El cambio de posición entre Johan y Albizua durante el tramo final de la primera parte evidenció que el planteamiento inicial del equipo azulón no estaba funcionando como se esperaba en un principio. Con la velocidad de Mustafá, quien junto a Javi Moreno gozó de las acciones más peligrosas de los visitantes, como máxima amenaza a la búsqueda de la espalda de Álvaro Rodríguez, el UCAM Murcia se fue deinflando a medida que su estrategia no daba frutos. «Nuestra idea era aprovecharnos de los espacios que se pudiesen generar a la espalda de Álvaro Rodríguez para crear peligro con la velocidad de Mustafá por banda izquierda, pero no lo hemos sabido ejecutar bien», añadió.

También despejó dudas acerca de la suplencia de Rafa de Vicente, quien fue suplente en detrimento de Ayala y Mario Robles: «Pensaba que Ayala y Mario nos iban a aportar mucho más recorrido y a ayudar a las carreras a la espalda. Tenía pensado que Rafa entrara cuando el partido bajase de ritmo para que nos pudiera aportar más poso, y creo que lo hemos conseguido, pero al final se nos ha puesto muy complicado».