No han pasado ni siquiera tres semanas desde que el mercado de fichajes llegara a su fin. Una ventana que, como sucede todos los años, ha dado mucho de sí. Los movimientos en las plantillas, aunque no abundantes, sí que han supuesto cambios importantes para todos los equipos del grupo IV de Segunda División B. También lo ha sido para el Fútbol Club Cartagena, que ha visto cómo dos de los tres movimientos que ha hecho en este periodo han tenido que esperar hasta los últimos días e incluso las últimas horas. Sin embargo, habiendo transcurrido tan poco tiempo, el Cartagonova ya ha tenido la oportunidad de empezar a ver las cualidades de los tres hombres que han llegado para reforzar la plantilla albinegra.
El primero en llegar fue Diegui Johannesson. Tras salir del Real Oviedo al no contar para el entrenador llegó a Cartagena para suplir la salida de Jorge Fucile y la baja por lesión de Markel Etxeberria. Y lo cierto es que hasta el momento no ha defraudado. Con gran protagonismo y presencia en ataque, el islandés ha demostrado que ha venido para ser importante, como ha demostrado en los cinco encuentros que ha disputado hasta la fecha con la camiseta del Cartagena. También importante está siendo Berto Cayarga. El extremo es uno de los dos hombres que llegó en el último día de mercado y ha demostrado que mereció la pena la espera. En los tres partidos que ha disputado ha tenido tiempo de marcar, asistir y dejar al feudo albinegro la sensación de que Borja Jiménez cuenta con un futbolista de garantías en la banda. El último ha sido Vinicius Tanque. Tras ser presentado a principios de la semana pasada, debutó el pasado domingo de la mejor forma posible. Un gol, otro anulado y alejando las dudas que había en cuanto a su incorporación desde el Botafogo.
Se puede decir, por tanto, que hasta la fecha los futbolistas que la comisión deportiva decidió incorporar parecen un total acierto. Sin embargo, sus buenas actuaciones están trayendo daños colaterales para otros futbolistas albinegros, que en el poco tiempo que comparten vestuario con los recién incorporados han visto cómo sus minutos han ido decayendo.
La irrupción de Berto Cayarga en el equipo es la que está suponiendo algunas de las modificaciones más relevantes. El extremo procedente del Racing de Santander apenas necesitó un partido -el de su debut- para ganarse su primera titularidad en Cádiz y que posteriormente fue corroborada ante la Balompédica Linense, encuentro en el que anotó el gol con el que el Cartagena abrió la lata y dio las asistencias en los otros dos goles albinegros. Unas actuaciones que parecen haberle hecho fijo en el once inicial para Borja y que parece que se prolongará durante varias jornadas. El primer afectado por esto fue Elady Zorrilla, que es quien llevaba un año y medio ocupando esa posición. La primera titularidad de Cayarga hizo que el técnico abulense probara en Cádiz con Elady en punta, partido en el que apenas tuvo incidencia en el juego y en el que terminó siendo sustituido. El domingo fue suplente ante el Linense.
También entran en esta encrucijada de posiciones los dos delanteros con los que el Cartagena comenzó la temporada. Pablo Caballero y Jovanovic parecen relegados a un segundo plano con las modificaciones. Especialmente el serbio parece haber sido el peor parado del 'overbooking' en la delantera. Tras un gran final de la primera vuelta en el que parecía haber tomado la delantera se ha quedado los tres últimos encuentros sin disputar ni un solo minuto. Caballero fue titular el domingo y también el elegido por Borja para sustituir a Elady en Cádiz. Una situación que se agrava aún más con la llegada de Vinicius Tanque. Además, el domingo en el Cartagonova pudimos ver la imagen de Elady Zorrilla, Jovanovic y Vinicius Tanque calentando en la banda mientras Pablo Caballero estaba en la imagen.
Los que tampoco parecen haber salido beneficiados son Santi Jara y Quim Araujo. Desde la llegada de Borja el centrocampista catalán ha visto cómo Lucas de Vega ha cogido el protagonismo en la media punta, llevándole a disputar menos minutos de los que venía teniendo con Munúa. Santi Jara, por su parte, se ha visto ensombrecido por las grandes actuaciones que viene realizando William de Camargo en banda derecha. El extremo de Almansa volvió tras su lesión en el mes de noviembre pero no llegó a alcanzar su mejor versión cuando fue entrando poco a poco en el equipo, lo que parece estar siendo un lastre ahora. No ha disputado ni un solo minuto en los cuatro últimos partidos y en el último ni siquiera fue convocado.
