El derbi comenzó repasando la historia para recordar que ayer se cumplían 107 años de la primera cronica escrita de un partido disputado en El Rubial, y terminó también buscando en la historia un resultado tan amplio a favor del Lorca Deportiva en partido oficial disputado en el centenario campo. Los visitantes vencieron con un claro 0-3, tras encontrarse con un partido más cómodo del que posiblemente se esperaban. Sobre todo cuando antes del descanso Perico fue expulsado y Luismi marcaba el segundo gol de los visitantes en la siguiente jugada.

Aunque el balón estuvo más tiempo en las botas de los jugadores locales, fueron los visitantes quienes aprovecharon mejor sus posesiones y las llegadas al área rival. Así lo hizo Andrés Carrasco al cuarto de hora, en un balón que le llegaba desde el centro del campo a la frontal de área, para controlar y batir por bajo a Javi Soto, obteniendo una ventaja en el marcador que pudo ampliar cinco minutos después Higging, quien solo ante el cancerbero aguileño lanzó alto.

La mejor ocasión de los locales llegó a la media hora, cuando Juan enviaba el balón al larguero en el saque de una falta. El encuentro dio un giro a falta de siete minutos para el descanso, Perico era expulsado con roja directa por una falta a Andrés Carrasco, lo que acarreaba a los costeros afrontar la segunda parte con un jugador menos. Pero todavía se le complicaría el partido más a los locales cuando Luismi sacaba desde el círculo central la falta y conseguía un golazo ampliando la ventaja, hasta un 0-2 que se antojaba como un muro infranqueable para los locales.

Pese a todo, tras la reanudación los costeros trataron de dar un paso adelante, mientras que los de Urbano protegían más su cómoda ventaja para salir al contragolpe y ampliar la renta, lo que no les fue efectivo hasta el minuto 83 cuando Sergio Piñero marcaba el tercero. Antes los costeros, con la posesión del balón, lo intentaron por las bandas, pero los centros de Morillas, Adri o Juanjo no encontraron rematador. El resultado podría haber sido más amplio para los visitantes si Javi Martínez hubiera acertado a batir a Soto en algunas de las ocasiones en las que llegó solo ante la portería. Aunque el 0-3 final ya supuso de por sí un resultado inédito por su amplitud.