El Cartagena volvió a sumar de tres en tres después de dejar escapar un empate la semana pasada en casa. En un partido más disputado de lo que cabía esperar, a los de Munúa se les puso todo de cara con los goles de Santi Jara y William de Camargo. Aunque el humilde Villarrubia recortó distancia justo antes del descanso, los albinegros aguantaron con algunos apuros para seguir líderes, ahora con cuatro puntos de ventaja sobre el segundo clasificado, el San Fernando.cuatro puntos de ventaja sobre el segundo clasificado

Llegaba el Cartagena a Villarrubia condicionado por las bajas. A medida que unos se recuperan, otros van cayendo, y en ese desbarajuste Munúa hizo encaje de bolillos para algunas posiciones como el lateral diestro. Sin Markel, lesionado de larga duración, ni Fucile, que cumplía ciclo de amarillas, la única opción fiable era Álex Martín, habitual central.

Arriba se echaba de menos a gente como Carrasquilla, Manu Viana, Jovanovic o Elady Zorrilla, al que la visita del Barcelona le salió cara. Pero el ataque sigue funcionando con la reaparición de Santi Jara y, sobre todo, con la irrupción de un William al que ya no hay manera de moverle del once titular.

Comenzó el partido en un césped artificial al que los albinegros no están acostumbrados, pero que tampoco condicionaba demasiado el juego. El Villarrubia quiso amedrentar al líder en los minutos iniciales, pero esa lucha de David contra Goliat estaba destinada a decantarse del lado del más fuerte.

A la primera llegada con cierto peligro, Santi Jara encarriló el partido para el Cartagena. El de Almansa recibió el balón con el bloque del Villarrubia muy adelantado. Tras hacerle un autopase al central Carlos García, se plantó solo ante el guardameta Morales, aprovechó su salida para driblarle e introducir la pelota en la red.

Llegaban más problemas para el Villarrubia con la lesión de Carlos Martínez, al que sustituía Javi Grillo. Sobre la media hora de juego, los locales insistían sobre el área albinegra, aunque poner en aprietos a Marc Martínez. Eso sí, la posesión era del cuadro manchego, y la movían con cierto criterio pese a las carencias técnicas de la plantilla. Sin embargo, lo único destacable fue un disparo mordido de Grillo.

Pero el Cartagena iba a volver a castigar la endeble defensa de los de Javi Sánchez. Los albinegros estaban inspirados en la definición, y el Villarrubia no estaba cerrando bien los espacios. En el 40 de juego, William de Camargo recibió entre líneas, se giró y disparó desde la frontal del área para colocarla pegada al poste. El portero morales llegó a tocarla, pero no lo suficiente. Era el estreno goleador William como jugador del Cartagena, que pone así la guinda a su excelente inicio de temporada.

El Villarrubia marca el 1-2 en el 45'

Los cartageneristas se las prometían muy felices para la segunda parte, pero justo antes del descanso el Villarrubia recortó distancias en una acción a balón parado rematada por Fran Minaya. El gol dejaba el partido abierto para la segunda mitad.

Una segunda mitad que seguía por los mismo derroteros que la primera. El Villarrubia, sin muchas ideas, intentaba ganar metros ante un Cartagena que cede muy pocas oportunidades y que amenaza en cada opción de peligro. La primera decisión de Munúa fue introducir a Rodrigo por un Quim Araujo bastante más desaparecido que otros días.

A medida que pasaban los minutos el partido se iba animando. El Cartagena pudo vivir tranquilo si Caballero hubiera anotado el tercero en una acción clamorosa. Tras la salida en falso de Morales, el balón le cayó al argentino en la frontal, para disparar con la zurda, su pierna mala. Con el portero fuera de sitio, el delantero albinegro la envió por encima del larguero.

Poco después, Carlos David cabeceó un saque de esquina, pero el balón lo despejó el portero local. Pero como el gol no llegaba y el resultado seguía reflejando una victoria mínima, el Villarrubia se fue creciendo. Principalmente, a balón parado era capaz de crearle muchos problemas a la defensa del Cartagena. Los últimos veinte minutos fueron una sucesión de balones colgados al área albinegra. Además, por momentos el Villarrubia aumentaba la presión y provocó algunos errores del Cartagena en la salida de balón.

Casi con el tiempo cumplido, el Villarrubia dio el susto, por medio de un libre directo lanzado por Piojo. Ejecutó la falta con la pierna diestra y estrelló el balón justo en la cruceta. En esos escasos centímetros estuvo la diferencia entre el empate y la victoria albinegra. Así pues, con el empate del San Fernando contra el UCAM, el Cartagena alcanza los 31, cuatro más que el segundo, y se mantiene invicto fuera de casa.