José Antonio García Rabasco, más conocido como Verza, es uno de esos jugadores que tiene el peso suficiente para ser portavoz de todo un vestuario y se expresa con tanta claridad que el oyente no se siente desorientado o incomprendido. Es de los que sabe qué mensaje quiere mandar y cómo hacerlo. Y en la jornada de ayer, lo que pretendía, era ponerle botas de plomo a todo aquel que tuviera pájaros en la azotea por la buena dinámica que lleva el Fútbol Club Cartagena.

El cuadro albinegro es el mejor visitante del grupo IV y el único equipo en todas las categorías (1ª, 2ª y 2ª B) que ha ganado todo lo que ha disputado lejos de su feudo. Un cuadro solvente en sus salidas en estas primeras 7 jornadas de campeonato que está traduciendo su solidez defensiva en puntos y que consigue rentabilizar al máximo los tantos que marca. Perola liga es un sendero muy largo en el que se ha dado el pistoletazo de salida hace muy poco.

Por ello, uno de los cuatro capitanes que tiene el cuadro albinegro, comparecía en rueda de prensa queriendo dejar patente que él no mira la clasificación a estas alturas de competición, y afirmaba que «espero que en el vestuario tampoco lo hagan. Supongo que alguno la mirará y se hará castillos en su cabeza, pero es un gran error. Es bueno todo lo que llevamos porque no nos lo va a quitar nadie pero hay que seguir echando puntos en la mochila».

El mediocentro de 33 años es todo un experto en el fútbol nacional. En 16 temporadas ha militado entre la Primera División y la Segunda. Con reconocido prestigio en la élite, Verza aseguraba que «estar en Segunda B no significa ser menos futbolista». Y lo dice alguien que ha pasado por momentos difíciles en los últimos dos años. «Me estaba viendo penalizado por decisiones de terceros. Estaba en el Levante y, por decisión del director deportivo, me hicieron irme en el último minuto de mercado a categoría inferiores. Luego, fui al Rayo Majadahonda, donde volví a sentirme futbolista a pesar de haber descendido. Posiblemente, si hubiera esperado más cuando el Cartagena me hizo la oferta hubiera tenido propuestas de categorías superiores. Al final, decidí dar un paso atrás porque me atraía el proyecto y el objetivo de este equipo y de esta ciudad», confesaba.

Verza hacía su primer tanto con la elástica cartagenerista el pasado domingo, frente al Algeciras. Un gol exquisito, de los que no te cansa. «Claro que lo he visto. Hoy, con las redes sociales es fácil. Es un buen gol y me gusta, no te voy a engañar. Pero bueno, esto del fútbol y no tiene memoria. No podemos pensar en lo bien que jugué el fin de semana pasado o en el gran gol que marqué. Hay que seguir», insistía.

En cuanto al próximo rival, el Marbella, también tenía su espacio en sala de prensa. Ganar en el Municipal marbellí haría que el equipo sumara 12 puntos de 12 posibles como visitante, algo que Verza cree que puede pasar, pero «hay que pensar que va a costar mucho, como los tres partidos anteriores fuera de casa. Todos ellos fueron victorias muy trabajadas donde el equipo, quizás, no se mostró muy combinativo pero se adaptó al campo. Lo bueno de nuestro equipo es que si toca ponerse el mono de trabajo estamos capacitado para ello. Yo creo que puede haber 4 de 4, claro que sí», confiaba.

Puntuar de tres frente a los de Cubillo sería dar un gran primer paso en este mes de infarto que le llega al Cartagena. Tras el encuentro en tierras malagueñas, los de Munúa recibirán al Córdoba, tendrán que ir al Nuevo Colombino a medirse al Recreativo de Huelva y visitará el Cartagonova el San Fernando, rivales todos ellos que aspiran a llevarse el título de campeón de grupo. «Es un mes importante pero pienso que tres puntos contra el Sevilla B son igual de importantes que contra el Marbella o Córdoba. Vienen cuatro jornadas donde jugamos contra equipos llamados a estar arriba. Sobre el papel, va a ser complicado pero no más que los anteriores», concluía.