Tres meses después de echar el cierre a una ampliación de capital que permitió ingresar 1,3 millones de euros, el consejo de administración del Real Murcia todavía no ha inscrito el proceso en el Registro Mercantil. Según los datos recogidos en dicho organismo administrativo, y consultados en el día de ayer por esta redacción, el capital social del Real Murcia CF SAD es de 178.742,29 euros, por lo que la escritura pública del aumento de capital llevado a cabo a finales del pasado año aún no se ha presentado en el Registro Mercantil de la Región.

Este dato desmiente a los actuales responsables del club grana, que el 29 de enero, tras la publicación en este diario de una información en la que se recogían distintas irregularidades llevadas a cabo durante la ampliación y que podrían poner en riesgo los títulos de más de 20.000 accionistas, desmentían la noticia, basándose en que toda la documentación había quedado inscrita en el Registro Mercantil, tal y como afirmaba el propio José María Almela, presidente de la entidad, a esta redacción.

Casi un mes después de esas declaraciones, también repetidas por Francisco Tornel, máximo accionista con un 13% del capital, el Registro Mercantil sigue sin tener noticias del aumento de capital social del Real Murcia CF SAD. Según la documentación general de la mercantil grana, actualmente hay un capital social de 178.742 euros, de los que un 84% está en manos de Mauricio García de la Vega después de que el TAS le confirmase como dueño de las acciones que pertenecían primero a Raúl Moro. Tres meses después del cierre de la ampliación de capital, en el organismo administrativo todavía no se tiene noticia del vuelco que ha dado el accionariado gracias al ingreso de 1,3 millones de euros. Dado que desde el club grana han preferido ocultar la no inscripción de esa documentación, tampoco es claro que se haya podido escriturar y elevar a público todo el proceso.

Distintas fuentes indican que el Real Murcia está teniendo bastantes problemas para confirmar a muchos de los accionistas que invirtieron su dinero en la compra de acciones. Pese a que a mitad de diciembre todos los aficionados que habían participado en la ampliación recibieron su título que les acreditaba como accionistas, elevar a público el nuevo capital se ha convertido en un quebradero de cabeza para el actual consejo de administración. Los problemas principales son dos. Por un lado, que muchos de los que adquirieron títulos son extranjeros, por lo que no han podido presentar el NIE o el DNI necesario para confirmar la suscripción, quedando esas acciones en el aire a la hora de que un notario dé el visto bueno.

Y, por otro, que parte del dinero recaudado quedó bloqueado en pasarelas de pago -en el club esperaban los últimos 200.000 euros a finales de la pasada semana-, no entrando en la cuenta corriente abierta por la ampliación de capital en la fecha establecida en el Boletín del Registro Mercantil y aprobada por el consejo de administración presidido por Víctor Gálvez.

Así, mientras en Nueva Condomina intentan salvar esos escollos para no seguir dando pasos en falso sobre un proceso que está impugnado por García de la Vega, el consejo de administración ha sido incapaz de poder cumplir con el último paso, el de elevar a público el nuevo capital social e inscribirlo en el Registro Mercantil, un movimiento obligatorio según establece la Ley de Sociedades de Capital.

En el título enviado a todas los accionistas, el consejo de administración explicaba en la letra pequeña que «el suscriptor podrá exigir al Real Murcia CF SAD la restitución del desembolso realizado en caso de no haber sido debidamente inscrita en el Registro Mercantil la ejecución del acuerdo de aumento de capital pasados doce meses de la fecha del acuerdo de la ampliación de capital publicada en el Boletín Oficial del Registro Mercantil».