El FC Cartagena ha entrado en el último tercio de la competición y a quince partidos del final de la temporada regular afronta un calendario en el que tiene que verse las caras con muchos, casi todos, los rivales del Grupo IV. Salvados, eso sí, los escollos de Recreativo de Huelva y UCAM Murcia, al bloque albinegro le restan difíciles compromisos con candidatos al título de Liga como el Melilla, el San Fernando o la Balompédica Linense.

De esas quince jornadas, los de Gustavo Munúa tienen algo a favor, y es que en el Cartagonova su camino se ha convertido en bastante más asequible. A priori, todo parece más fácil en su campo, donde tendrá ocho rivales de los que al menos cinco están en la parte media y baja de la clasificación.

Recordaba el preparador uruguayo hace unos días que en las segundas vueltas todo se aprieta, todos los equipos tienen algo que jugarse y resulta mucho más difícil sacar los puntos, tanto con los de arriba como con los de abajo.

El bloque albinegro tiene que recibir en el Cartagonova a dos equipos de la Región: Jumilla y Real Murcia.

El Jumilla está en la décima posición en la clasificación y viene herido tras perder ante el Don Benito; el Real Murcia llegará a Cartagena en la trigésimo segunda, a comienzos del mes de abril. No se sabe cómo habrá evolucionado por entonces el equipo grana, lleno de sobresaltos de toda índole semana tras semana.

Además de los dos derbis regionales, al Cartagena le aguardan en su propio campo equipos como el Malagueño -jornada vigésimo sexta- que es el último clasificado del Grupo IV. Sus quince derrotas en veintitrés partidos lo dicen todo.

Quince días más tarde será el Sevilla Atlético, decimosexto, en puesto de promoción por la permanencia, que ha ganado dos partidos a domicilio en lo que va de temporada.

Tras el bloque hispalense, el Cartagonova recibirá la visita del Villanovense, decimotercero y una sombra de otras temporadas. No ha ganado ni un encuentro a domicilio.

El Ejido, tras el derbi, es el siguiente. Es el único que ha ganado al Cartagena en las últimas quince jornadas, pero ahora roza los puestos de descenso.

El Marbella viaja en la jornada trigésimo sexta. Es undécimo y con un paupérrimo bagaje lejos de su campo (dos triunfos tan solo).

Por último, el gran hueso llega al final, con el RB Linense, que a pesar de haber perdido fuelle, está a cinco puntos de los puestos de promoción.