¡Que nos quiten lo bailao! Esa es la impresión que se llevan muchos de los aficionados albinegros que acudían ayer en masa a La Condomina para ver la segunda victoria del equipo cartagenerista en Murcia, después de la protagonizada hace dos meses y medio en Nueva Condomina.
Los aficionados del conjunto blanquinegro están viviendo un año mágico con un equipo que vuelve a ser líder como en temporadas anteriores, pero que además gana en casa de sus grandes rivales como el Real Murcia en la primera vuelta o el UCAM Murcia en el caso de ayer.
Nunca antes se pudo ver el viejo campo murciano con tanto seguidor cartagenero y cartagenerista como en la mañana de este pasado domingo. Más de dos mil almas vitorearon y festejaron la victoria por 1-3 del equipo de Gustavo Munúa, que no solo se llevó los tres puntos sino que ofreció, por momentos, una exhibición de fútbol en uno de los santuarios del fútbol de Murcia.
Eran muy conscientes desde el mismo instante en el que compraron la entrada para viajar a La Condomina, que este FC Cartagena es un equipo que puede llegar lejos, más incluso que el de Monteagudo. Ha dado muestras de ello en estas veintitrés jornadas que se han vivido hasta el momento, por lo que la probabilidad de disfrutar de la victoria es cada vez mayor. Más se disfruta si está el liderato en juego y ante un oponente que no sabía lo que era hincar la rodilla en casa desde septiembre.
Los aficionados, algunas veces apagados por el aire y el frío que sufrieron en el campo, acabaron coreando a su equipo con gritos de '¡Olé, olé!'. Tan solo les faltó hacer la ola, porque se sentían casi como en su casa.
Hay que destacar el comportamiento de una afición que supo animar, estar con los suyos y marcharse a casa sin ocasionar el más mínimo problema. Acudir con ese número tan importante de espectadores a un campo rival y que los problemas brillen por su ausencia es para felicitar a aquellos que viajaron y corearon a su equipo y a los que promovieron y organizaron el desplazamiento.
Este equipo está llamado a seguir dando alegrías a una afición que, de momento, ya se ha llevado unas cuantas esta temporada.
