El Yeclano Deportivo retomó la competición de la mejor forma posible, con una goleada (6-0) a todo un UCAM B por medio de ese estilo tan propio con el que devora a sus rivales a base de consistencia y presión. Los de Sandroni cierran la mejor primera vuelta de su historia sumando 49 puntos y transmitiendo unas sensaciones que prometen muchas posibles alegrías en este 2019.

El partido iba a durar un mínimo asalto, los trece minutos que tardó el conjunto azulgrana en encarrilar el encuentro ante unos jóvenes universitarios a los que se les cayó el mundo encima demasiado pronto. Eso sí, cabe destacar en favor de los de Sergio Aracil que el primer tanto llegó en una jugada con falta previa de Víctor Fenoll, que acabó llevándose la bola para dársela a Mario, y éste la puso para que Javi Muñoz anotara con algo de intriga golpeando ambos palos.

El segundo llegaría poco después, en un córner de Álex Vaquero que Iker Torre remató en el corazón del área pequeña con facilidad, y el asunto parecía ya decidido con más de 75 minutos por delante. Llegó entonces una fase de juego con regusto a mazapán, donde ni el Yeclano quería forzar la máquina ni el UCAM conseguía resetear para competir.

Pasada la media hora, Víctor Fenoll hizo una de sus jugadas típicas de 'Oliver y Benji' y fue objeto de penalti en la línea de fondo. Vaquero no fallaba desde los once metros y sentenciaba un encuentro que podría haber concluido ahí.

Pero no. El Yeclano siguió insaciable, corriendo, presionando, ayudando, achicando y marcando. Vaquero volvería a repetir mediante la pena máxima, esta vez por un penalti tan evidente como prescindible en una gran acción de Alayeto, quien lograría a su vez el quinto en la siguiente acción machacando con fuerza una excelente combinación de equipo.

La media docena la cerraría Iker Torre con un bellísimo remate de cabeza a centro medido de Mario, y la guinda para los locales habría sido que el canterano Sergio Bañón hubiera anotado la que tuvo en el descuento como broche a su sobresaliente y prometedora participación. Al término del encuentro, ovación de La Constitución a los suyos y también a los hermanos Castillo, jugadores del UCAM B, en su visita a su pueblo.