Tener que elegir entre dos de los mejores delanteros de la categoría. A eso es lo que se enfrenta cada semana Gustavo Munúa, entrenador del Fútbol Club Cartagena. Todas las jornadas, la misma pregunta en su cabeza. ¿A quién pone como referencia del fútbol ofensivo de un equipo que aspira a todo? Un bendito problema para el preparador uruguayo. Y de momento, la respuesta es que Aketxe gana la partida.

Desde su llegada a Cartagena la pasada campaña, el delantero vasco se ha metido al público en el bolsillo jornada tras jornada a base de goles. El año pasado sumó 14 en total. Una cifra que le valió para ganarse el respeto de todos los aficionados, además de para conseguir una merecida y reclamada contratación. Llegaba cedido del Albacete, se ganó el cariño de todos y volvió a vestir la elástica albinegra ya en calidad de jugador en propiedad.

Este año, Munúa está contando con él más que con Rubén Cruz. El vasco suma más de mil minutos sobre el terreno de juego. Ha sido titular en 11 de los 18 encuentros (sumando la Copa del Rey) que ha disputado el cuadro albinegro en la presente temporada. Y cada vez que es sustituido, que su nombre suena por la megafonía del Municipal Cartagonova, queda evidenciado que es uno de los favoritos, uno de los niños mimados, de la afición albinegra. Tiene velocidad, entrega, desmarque, visualiza el espacio con facilidad, es un continuo quebradero de cabeza para las defensas rivales, y lo más importante, tiene gol. Este año ha marcado cinco tantos, todos en el campeonato liguero. De momento va camino de volver a repetir los mismos números de la anterior campaña. Con 16 jornadas disputadas, Aketxe había marcado el pasado curso 6 goles, uno más que en el actual.

Y la duda viene cuando, en el banquillo, está otro de los delanteros con mejores cifras del año pasado. Y eso que llegó en el mercado invernal. Rubén Cruz no está viviendo las mismas emociones que la última temporada pero, aún así, suma los mismos goles que Aketxe, cinco en total. En su caso los reparte en las dos competiciones que ha jugado el Fútbol Club Cartagena este año, la liga y la Copa del Rey. En el campeonato regular, el andaluz suma tres goles y en el torneo del KO, Cruz superó a los porteros rivales en dos ocasiones.

Y eso que Rubén Cruz no pudo empezar a disputar partidos desde el comienzo de la temporada ya que tenía que cumplir sanción por la tarjeta roja que vio frente al Extremadura en la última eliminatoria de los play off de ascenso a Segunda Division.

La primera titularidad del de Utrera sería contra el Don Benito, en la Copa del Rey, torneo en el que no tenía que cumplir dicha sanción. En ese partido marcó su primer tanto. Repetiría en el once inicial frente al Logroñes, donde tambien vio portería rival aunque el equipo caería eliminado en la tanda de penaltis. En liga, la primera vez que Munúa apuntó su nombre en el once titular fue en la cuarta jornada, frente al UCAM Murcia, donde la racha del futbolista de 33 años se cortaría hasta cinco jornadas después, donde, curiosamente, volvía a salir desde el banquillo y se reencontraba con el gol.

La lucha entre ambos es voraz. Los dos quieren llegar a las mejores cifras. Y eso se vería reflejado sobre el césped en el partido que disputaba el Cartagena frente al Badajoz hace un mes. Penalti en el ultimo minuto. Los dos querían lanzarlo. Se vio una discusión sobre el campo en la que Cordero tuvo que poner paz. Terminaría lanzándolo Cruz y ese gol le valía al Cartagena para sumar tres puntos. Un gesto al que se le ha tratado de restar importancia desde el cuerpo técnico. Y es cierto que no fue a más, como también lo es que la relación entre ambos es de competencia sana, leal.

Al final, son dos delanteros que serían referencia en cualquier equipo que presente unos objetivos como los que tiene la escuadra albingra esta temporada. Dos hombres condenados a entenderse, dos nombres que estarían subrayados en la libreta de cualquier entrenador. Tanto Aketxe como Rubén Cruz son jugadores que aspiran a todo. Una carrera que gana por minutos Aketxe. En cifra de goles, por ahora, han firmado las tablas.