Juan Carlos Guillamón acudía el pasado sábado para ver a su exequipo cómo perdía en casa frente al Levante. El conjunto cartagenero acumula ya siete jornadas consecutivas sin ganar un partido, tres de ellas sin el preparador murciano en el banquillo. Estuvo en el Palacio de los Deportes acompañado por Juan Fernando Romero, antiguo patrocinador del club con Plásticos Romero.

El técnico cesó porque, según el club, la deriva del equipo no era la mejor y se había apartado de los objetivos por los que se había planificado la temporada. Cuando él se marchó, el equipo estaba a dos puntos de los puestos de Copa. Ahora, la realidad dice que el Jimbee Cartagena se encuentra a seis punttos de esos mismos lugares y a solo tres del descenso a Segunda División.

Guillamón sigue sin cobrar su finiquito. Desde el club consideran su despido de procedente. La intención de Jimbee era pagar solamente el mes que había trabajado.

Hasta dos reuniones ha mantenido con los dirigentes de la entidad sin entendimiento.

Lo han echado sin darle explicaciones y ahora no puede dirigir a nadie. Además se encuentra en excendencia de su anterior trabajo, por lo que no puede regresar hasta junio.

Ahora su intención es denunciar por vía federativa el incumplimiento de su contrato, a la vista que desde el club no le aportan una solución.

Será el comité jurisdiccional el que decidirá acerca de su contrato. Fuentes cercanas al preparador están convencidas de que le darán la razón, pues aseguran que su contrato está en regla y que así se lo han hecho saber desde la propia RFEF y su abogado. Quiere cobrar todo el año.

Juan Carlos no ha querido hasta ahora airear nada de lo que le ha ocurrido. Después de tantas temporadas en la entidad, considera que se merece el más mínimo respeto por parte de los actuales dirigentes, que fueron los que decidieron su no continuidad. No deja de ser curioso, por otro lado, que con estos nuevos directivos el entrenador haya durado poco más de un mes en el cargo tras el abandono de Plásticos Romero, la empresa que avaló su llegada hace cinco años.

El presidente lo critica

El presidente lo criticaMientras Guillamón prefiere ser cauto en sus palabras para no interferir en la negociación de su finiquito, el que sí se ha despachado a gusto ha sido el presidente del club, Miguel Ángel Jiménez. En una tertulia organizada por el portal web sportcartagena.es, Jiménez decía de Guillamón y su destitución lo siguiente: «La medida -su cese- estaba tomada prácticamente antes de que empezara el año, pero como somos gente que confiamos en las personas, tuvimos una reunión con él y le propusimos que hubiera dos primeros entrenadores, André de ataque y JCG defensivo. Él no quiso. Y le dimos la oportunidad. Guillamón no llegó a entender el concepto y lo que quería la empresa».

El mandatario añadía, a continuación, que Guillamón no supo entender el concepto que él tiene de «Un equipo con actitud, como la de la empresa, que te levantes por la mañana con la sonrisa en la cara, que empujes las 24 horas del día, 365 días al año, que llegues el primero y te vayas el último, que tengas una involucracion total con el equipo, que sientas que somos un equipo ganador que queremos llegar a lo más alto. Guillamón no lo entendió desde el primer momento, le dimos la oportunidad pero ya sabíamos que no iba a llegar a buen puerto y así ha sido».

El expreparador del equipo cartagenero anda muy cabreado al considerarse ninguneado, pero prefiere no entrar al trapo para no enredar más con el club ni con una afición que ha estado con él durante tantas temporadas.