Durante nueve días, las directivas del Real Murcia y el FC Cartagena han bailado al ritmo del 'Amigos para siempre'. Después de un par de temporadas de malas relaciones, la concordia ha sido la protagonista. José María Almela, presidente grana, no dudaba en afirmar hace una semana que quería que los albinegros ganaran al Badajoz para que sus aficionados se animasen a estar en Nueva Condomina. Paco Belmonte, máximo responsable albinegro, deseaba, por su parte, que el choque de hoy fuese «una gran fiesta regional». Presentaciones conjuntas, elogios mutuos, visita a Fernando López Miras... Actos y más actos en los que nada hacía presagiar la llegada del partido más esperado de la temporada y de mayor rivalidad regional.

Pero el final de la tregua tiene fecha y hora. Será esta tarde, cuando el reloj marque las cinco en punto y el colegiado señale el comienzo del partido. Con las aficiones disfrutando de su particular batalla, granas y albinegros dejarán dejarán de lado la bandera blanca que han ondeado sus jefes para conquistar una guerra que vale más que tres puntos, que permite disfrutar durante una semana del subidón que da ganarle a tu vecino.

Si es difícil acertar lo que va a pasar en cualquier encuentro liguero; lo es aún más sabér qué va a suceder hoy sobre el terreno de juego de Nueva Condomina. Cualquier pronóstico quedará invalidado en el momento que el balón comience a rodar. De nada servirán tampoco esas dinámicas que indican que el Real Murcia anda de capa caída y el FC Cartagena llega lanzado. Sin embargo, los granas saltarán al terreno de juego con más enemigos que su rival. No solo tendrán que combatir con los once guerreros que elija Munúa, sino que también deberá hacerlo con las lagunas que invaden su juego y, sobre todo, con su falta de gol.

Y el remedio a esto último parece complicarse. Víctor Curto sigue arrastrando problemas físicos, lo que hace difícil que pueda ser de la partida, y a Chumbi aún le falta para estar al cien por cien. Así, lo normal, es que Manel Martínez sea el elegido en la punta de ataque, donde Dani Aquino deberá dar el paso al frente que parece no llegar nunca.

La única duda no estará en la delantera. Tras varias jornadas de cambios sin resultados, Manolo Herrero deberá decidir si sigue probando o si vuelve a la fórmula inicial, la del principio liguero. Lo que por fin estará en su sitio son las cabezas de los jugadores. Sobre todo después de que esta semana hayan podido cobrar las primeras nóminas de la temporada.

El FC Cartagena llega a este derbi prácticamente lanzado. Disipadas las dudas del comienzo de temporada, el equipo de Gustavo Munúa empieza a funcionar como un reloj y a sacar puntos en casa y fuera. Eso sí, en su último compromiso liguero, ante el Badajoz, no deslumbró, y la victoria no llegó hasta el tiempo de descuento con un tanto de Rubén Cruz.

Además, casi toda la plantilla está disponible para jugar en La Nueva Condomina. Mario Fernández, recuperado de su lesión en la rodilla, vuelve a la convocatoria, aunque Joao Costa ha respondido muy bien en el último mes y, en principio, mantendrá su puesto de titular. Salvo el gallego Álvaro Queijeiro, que poco a poco se va integrando en la dinámica del equipo tras tres meses ausentes, el Cartagena llega a Murcia con el equipo al cien por cien.

Munúa cuenta con un abanico de opciones muy diverso para el partido de esta tarde. La defensa se ha asentado, con Óscar Ramírez, Moisés, Sergio Ayala y Jesús Álvaro formando la línea de zagueros. El lateral canario vuelve al equipo tras perderse el último encuentro por acumulación de tarjetas.

En la medular, Cordero es el único fijo. El uruguayo últimamente ha alineado a Jesús Carrillo y Moyita, dos mediapuntas de perfil ofensivo, para flanquear al mediocentro sevillano. En la delantera, la gran duda es si jugará Aketxe, Rubén Cruz o los dos al mismo tiempo, aunque Munúa suele a alinear de inicio a solo uno de sus dos 'killers'.

La apuesta del conjunto albinegro esta temporada es la de salir a dominar los partidos y a tener la posesión del esférico. Además, el refuerzo de la solidez defensiva en los últimos meses ha sido una de las claves por las que el equipo ha pasado de estar en zona de descenso a instalarse en puestos de play-off. Con la victoria ante el Badajoz, alcanzaron la cuarta plaza por primera vez este curso, y le han dado la vuelta a la tortilla de tal manera que llegan al derbi por delante del Real Murcia en la clasificación, cuando hace un mes la diferencia era considerable en favor de los hombres del técnico Manolo Herrero.