Gustavo Munúa, entrenador del FC Cartagena, no es de reprochar a sus jugadores públicamente los errores que puedan tener sobre el terreno de juego. Es de los que prefiere aclarar las situaciones dentro del vestuario. Por eso, el uruguayo explicó tras el encuentro que si bien se marchaba con sabor amargo, estaba contento con la actitud de sus jugadores y la actitud para adaptarse a unas circunstancias que él insistió que resultaron adversas como el mal estado del césped del campo del Villanovense.

«Era imposible jugar así», esgrimía el preparador, quien añadía, ante la insistencia de un periodista de si achacaba el empate a la situación del césped: «Un equipo que quiere jugar al fútbol aquí, lo tiene imposible hacerlo. Nos hemos tenido que adaptar a eso y es muy complicado». No obstante, añadía «estoy muy contento con el equipo».

«Al Cartagena no se le puede pedir más», continuó diciendo el preparador en rueda de prensa. «Así y todo hemos tenido muchas posibilidades de ganar y con todas las ocasiones claras que tuvimos, en un empujón del rival en una segunda jugada nos empataron».

El entrenador cartagenerista relató que tuvieron sobre el césped situaciones muy favorables para haber puesto tierra de por medio. «Fueron varias las ocasiones muy claras, pero nos ha tocado vivir estas circunstancias. Es amargo, sobre todo por cómo se ha dado el partido. El equipo estaba serio y el partido estaba de la mano».

Admite que fue «una lástima», porque «hicimos todo y nos merecíamos ganar». Pero el hecho de no haber sentenciado provocó la pérdida de dos puntos que parecían estar ya en su casillero. «No matas y un rebote te deja con malas sensaciones. Era imposible jugar con el estado del césped», volvía a decir el preparador cartagenerista, que por vez primera esta temporada repetía alineación. Era la misma que ganó hace una semana en casa frente al Sanluqueño. «Era el mejor equipo que tenía para este partido, porque podíamos hacer daño con jugadores interiores», y así sucedió mientras el césped respondía en el campo del Villanovense.

Por otro lado, Sergio Ayala, decía que se marchaba con la sensación de dejarse dos puntos en el camino. «Hemos jugado bien en ocasiones, pero es un campo complicado. Estábamos cómodos pero un rebote nos hizo empatar. Lo que debemos hacer es tratar de hacer bueno este punto con un triunfo la próxima jornada en casa», añadía el defensa en declaraciones a Onda Regional.