El Fútbol Club Jumilla no pudo sumar los tres puntos ante el colista de la liga, el Club Atlético Malagueño, en un partido que finalizó con empate sin goles. Primer punto de la temporada del equipo andaluz después de nueve jornadas de competición disputadas, en un encuentro en el que debutó Manolo Sanlúcar en el banquillo malacitano, aportando un necesario aire fresco al equipo filial.

A lo largo de la semana ya se iba advirtiendo de que se trataba de un partido trampa para los vinícolas, al tratarse de un equipo filial que no ha comenzado bien la temporada y estaba necesitado de puntos. Un partido del que nunca se sabe lo que esperar. El Jumilla fue el dueño del partido y la escuadra más atrevida durante los noventa minutos de encuentro, pero finalmente tuvo que conformarse con un empate.

El equipo jumillano saltó al campo con dos cambios en relación al anterior encuentro ante el Almería B, el cual ganó por un ajustado 1-0. Leonel Pontes dejó fuera a Aarón Simpson y Bouba, que fueron reemplazados por Mario Marín y Stevenson. Los andaluces salieron con muchas ganas en unos primeros minutos de tanteo entre ambos equipos, aunque este ansia la supo dominar el equipo jumillano, para tornarla en pausa. Poco fútbol en la primera parte, siendo una galopada de Antoñin en el minuto 30 la ocasión más clara, que fue rechazada por el portero jumillano, Simón Ballester, con una espléndida parada, aunque la jugada quedó anulada por fuera del juego del delantero del Atlético Malagueño. Poco más en una primera parte descafeinada donde no hubo juego atractivo por parte de ninguna de las dos escuadras.

En la segunda mitad salió más enchufado el Fútbol Club Jumilla, que a los nueve minutos de la reanudación gozó de una doble ocasión al saque de una falta de Manolo, la cual remató primero Donován y, en segunda instancia, Peque, pero el portero Kellyan rechazó de forma efectiva con dos paradas espléndidas.

El técnico portugués del Jumilla, Leonel Pontes, ordenó en la segunda parte cambio de banda de Óscar Rico y Peque y, con ello, el conjunto vinícola ganó en profundidad y velocidad en busca de un gol que no llegaba. Por su parte, el portero jumillano Simón Ballester fue el gran protagonista en el final del choque al evitar con dos grandes intervenciones la primera victoria de los malagueños en liga. Carlos Álvarez y Donovan llevaron peligro al área del Malagueño en varias ocasiones en los últimos diez minutos de juego, pero no estuvieron acertados de cara al gol y el árbitro pitó el final de un encuentro en el que no se movió el marcador.

Con este empate, son cuatro las jornadas que lleva el Jumilla sin conocer la derrota, en las que ha sumado ocho puntos y sigue en la zona media de la clasificación del Grupo IV de la Segunda División B.

El próximo domingo, a las 12.00 horas, el conjunto vinícola volverá al estadio Uva Monastrell después de cuatro jornadas jugando fuera de su feudo. En esa ocasión, recibirá la visita de unos de los equipos gallitos de la categoría, el líder Unión Deportiva Melilla, que se presenta como uno de los candidatos a obtener el billete a la Segunda División.