No había sucedido todavía en la etapa de Gustavo Munúa al frente del FC Cartagena, pero Juan Carlos Menudo se encargó de que siguiera la tradición. Definitivamente, la costumbre de que cada futbolista con pasado en el FC Cartagena anote en su regreso al Cartagonova, no era cuestión exclusiva de la era de Alberto Monteagudo.

Juan Carlos Menudo empezó a sentir el runrún del público en los primeros minutos, cuando lanzaba los córners. Jugó dos temporadas con la casaca albinegra, divididas en dos etapas (2013-2014 y 2015-16), y no salió muy bien de la entidad cartagenerista. Acabó en guerra con la directiva al denunciar el impago de 7.100 euros.

En el Melilla, el futbolista andaluz se siente importante, es una pieza fundamental en el centro del campo y en la circulación del esférico, y además redondeó su gran actuación con dos tantos que sirven para mantener, con más distancia aún, al conjunto de la ciudad autónoma en el liderato. El primer gol le cayó de regalo de Fito Miranda, pero definió con maestría ante Mario, y en el segundo, engañó al recién ingresado Joao Costa al ejecutar la pena máxima.

Isi Ros, Artiles, Salva Chamorro, Marc Fernández (por partida doble) y Carlos Indiano conforman la lista de ex jugadores del Cartagena que el año pasado marcaron en su regreso. El año anterior también lo hicieron Óscar Rico y Antonio Megías.

Todo ello en un partido convluso, raro, de ritmo lento en el que el Melilla impuso su superioridad con el paso de los minutos. Sobre todo, en una jugada que acabó decantando el partido, en el minuto 62. Balón largo para Óscar García y Mario Fernández llega tarde y le derriba. Por si fuera poco el penalti, el consiguiente 2-0 y la amarilla para el guardameta cántabro, Mario se dejó algunos dientes por el camino, y se tuvo que marchar en camilla del terreno de juego por el fuerte golpe que se llevó. En la primera mitad, el partido ya se había parado durante unos minutos para atenderle. El portugués Joao Costa, su sustituto, no pudo hacer nada para detener la pena máxima lanzada por Menudo.

Cuatro expulsados

Cuatro expulsadosDespués del 2-0 y con media hora de juego por delante, el Cartagena perdió el norte. Se lanzó a por el empate con más corazón que cabeza, y acabó con nueve hombres sobre el terreno de juego, e incluso pudo ser alguno menos. En una jugada en el lateral del campo, próxima a la zona de banquillos, Cordero hizo un gesto feo ante un rival, e intervinieron miembros del cuerpo técnico de los dos equipos. Munúa quiso apaciguar los ánimos, con una tangana importante sobre el césped, y su segundo, Cristian Berman, fue expulsado. El árbitro también echó al técnico del Melilla, Luis Miguel Carrión. Según el entrenador visitante, intervino en la bronca para evitar que expulsaran a Cordero, porque le conocía. «He estado separando, y ya se sabe, el entrenador siempre es el que paga. La próxima vez me saldré y si expulsan a algún jugador me dará igual», fueron las sorprendentes declaraciones de Carrión.

A partir de ahí, mientras el juego estaba más calmado que nunca y el Melilla tenía los tres puntos completamente en el zurrón, la afición del Cartagena empezó a dirigirse hacia la puerta de salida, sin esperar a que terminara el partido, viendo como se escapaban otros tres puntos del Cartagonova. Algún jugador perdió los estribos ante la impotencia, como Elady Zorrilla, que le soltó una patada sin sentido a un rival y vio la cartulina roja. El jienense, que se postulaba como posible titular tras marcar tres goles en los dos últimos partidos, falló una ocasión clara cuando salió, y encima se perderá el próximo partido, y quién sabe si alguno más, por esa patada a destiempo.

Cuando parecía que la cosa no podía ir peor, a Antonio López también se le cruzó el cable y agarró al delantero Yacine Qasmi en el último minuto del tiempo de descuento. Resultado: segunda amarilla y otro partido de suspensión. En total, cuatro expulsados en el partido, tres por el bando local, y la tercera derrota en casa en liga, la tercera contra un rival directo por el ascenso.