¿Se puede poner la mente en blanco para olvidarnos de los problemas? ¿Es posible rendir al cien por cien cuando nuestra cabeza está en otro lado? ¿Vale con contar hasta tres o con, como tantas veces nos han aconsejado desde niños, inspirar y espirar? Estas son algunas de las preguntas que en las últimas semanas ocupan un buen espacio de los pensamientos de los jugadores del Real Murcia. Aunque la plantilla grana insiste en el buen rollo del vestuario y en la implicación en el trabajo, también han dejado entrever, como hizo hace unos días Víctor Curto, que si los impagos se alargan, el malestar acabará afectando a lo deportivo.

Cuando los titulares positivos deberían superar a los negativos por el buen arranque liguero de los granas, los problemas económicos, que hacen que los jugadores no hayan cobrado ni agosto ni septiembre, y que los empleados arrastren ya seis mensualidades sin percibir, se han colado de lleno en los pasillos de Nueva Condomina y Cobatillas. Las promesas incumplidas por parte de Víctor Gálvez no ayudan, de hecho los futbolistas compaginan entrenamientos con reuniones para ver cómo actuar si la situación se alarga y con declaraciones que nada tienen que ver con los partidos. De hecho, esta semana, apenas se ha hablado del Marbella, equipo al que hoy se enfrentarán los granas en el primer test serio de lo que va de campaña.

El equipo andaluz se convertirá en un termómetro que no solo medirá el trabajo de Manolo Herrero y sus chicos sino que también se encargará de demostrar si los murcianistas son capaces de mantener la mente en blanco, centrarse en lo que ocurre en el césped y dejar en casa el malestar por las dos nóminas impagadas. La pasada jornada, en la que el San Fernando se llevó un punto de Nueva Condomina, ya se vieron algunos detalles que hacen pensar que jugar con ansiedad y de mal humor no ayuda.

Que sus jugadores tomen aire y suelten aire para olvidar los problemas institucionales será la gran tarea de un Manolo Herrero que, sobre el césped, lo tiene todo más que claro. Lleva el técnico grana confiando en un once desde que se inició la temporada y no va a ser diferente hoy. Salvo sorpresa, no se esperan cambios en la alineación. Tampoco en la apuesta por el balón. Lo único que deberán mejorar los murcianistas es su acierto dentro del área, y es que las ocasiones falladas siempre le acaban pasando factura.

Enfrente estará un Marbella que quiere volver a ser un referente del Grupo IV, pero que ha empezado con algo de irregularidad. Eso sí, en su estadio, los andaluces suman tres victorias en los tres partidos que han disputado como locales. Para este choque, Rafael Pérez, 'Padilla', tendrá las bajas de Añón, Montero y Juanma.