El FC Cartagena ha empezado a desperezarse tras un nefasto inicio de la competición. Con los dos triunfos conseguidos de forma consecutiva ante el Jumilla y frente al Almería B, el bloque entrenado por Gustavo Munúa ha empezado a renovar el aire que comenzaba a viciarse alrededor del equipo tras dos empates y dos derrotas en las cuatro primeras jornadas jugadas.

Además, un aspecto más que reseñable no es solo los seis puntos sumados en dos semanas, sino la capacidad anotadora del equipo en este periodo. En seis jornadas el equipo suma ya diez tantos y siete proceden de los dos últimos enfrentamientos -tres ante el Jumilla y cuatro contra el Almería B-. Solo un gol menos lleva este Cartagena de Munúa que el de Alberto Monteagudo de hace ahora justo un año, aunque aquel ya había logrado tres victorias y dos empates -tres puntos más que ahora-.

De esas diez dianas que han anotado los albinegros ocho han llegado de jugadores de segunda línea e incluso de un defensa, como Jesús Álvaro, un auténtico estilete en ataque.

Este ramillete de jugadores tiene mucho peso en la reacción lograda y no hace sino ofrecer un esperanzador futuro al equipo, demasiado acostumbrado en la segunda vuelta de la pasada campaña a tirar de sus dos atacantes, Rubén Cruz y Aketxe, para sacar las castañas del fuego.

Aketxe anotó por partida doble el pasado 23 de septiembre ante el Jumilla, pero el entrenador lo dejó en el banquillo esta última jornada. Apostó por un media punta como Moyita y un atacante como Rubén Cruz. Este último no se ha estrenado aún en Liga, aunque sí que lo hizo en la Copa del Rey -dos tantos-.

Mientras tanto, futbolistas como Elady -doblemente goleador ayer-, Fito Miranda -dos-, Jesús Álvaro, Moyita, Santi Jara y Cordero ya han podido estrenar su casillero anotador. El Cartagena está ofreciendo variantes en ataque y son más y mejor los jugadores que se incorporan arriba, bien para el útimo pase o para ofrecerse y encarar.

La pasada campaña los futbolistas de segunda línea anotaron 21 goles -Chavero y Hugo Rodríguez fueron los máximos anotadores con cuatro tantos-, pero el equipo notó mucho esa ausencia de futbolistas con olfato cuando Rubén Cruz o Aketxe no andaban finos en determinados momentos.

Munúa asegura que está muy satisfecho con las variantes que le ofrece este equipo, con jugadores que pueden pasar de la titularidad a la suplencia -como es Elady- o al revés -Moyita- sin problema alguno.

Hay un caso muy concreto que toca a la defensa y es Óscar Ramírez.El futbolista no había perdido hasta hace dos semanas ninguna convocatoria en el Cartagena -a excepción de cuando estaba lesionado o sancionado-, pero Munúa ha decidido dejarlo en la grada en las dos últimas semanas, a pesar de que se le había considerado como uno de los futbolistas más regulares del proyecto pasado y presente.

Como el acierto o no va por rachas, el que Gustavo Munúa cuente en estos momentos con tal grupo de futbolistas que empiezan a dar resultado de cara al gol, le facilita que las opciones de sacar adelante los partidos cuando anden atascados sean mucho mayores.

De momento el equipo camina en la décima posición y es el tercer equipo que más a tantos ha anotado, después del Granada B y el Marbella.