Juan Lillo es desde junio de 2017 entrenador del Cartagena B, en lo que se considera un proyecto muy joven pero con la intención de consolidarse en el tiempo y convertirse en la referencia del fútbol base de la ciudad portuaria.

El entrenador albinegro reconoce que un buen ramillete de futbolistas que militan en su equipo tendrían más fácil debutar en Segunda División B si no estuvieran en este equipo. Aunque suene contundente, Lillo lo justifica aduciendo que la calidad de los integrantes de la primera plantilla y la exigencia delclub por el ascenso provocan que los canteranos no tengan nada fácli dar el saldo. «Hay jugadores que están con nosotros que han recibido algunas ofertas de Segunda B y creo que lo tendrían más fácil en cualquier otro equipo de la categoría, pero es que es complicadísimo jugar en la primera plantilla. Por suerte para el Cartagena, los dirigentes están confeccionando plantillas buenísimas.

Es como el Real Madrid de la categoría y muy difícil dar el salto».

El preparador del filial afirma que independientemente del entrenador que haya en el primer equipo, el club demanda estar siempre entre los mejores y además el público reclama buen fútbol y buenas sensaciones: «Este Cartagena tiene mucha exigencia. Si gana 4-1 y no juega bien la gente se enfada. Si no gana, hay presión. Es muy complicado, por lo que entiendo perfectamente a Gustavo Munúa».

Lillo es paciente, sabe perfectamente donde está y de ahí que su trabajo desde abajo sea lento pero trata de pisar siempre en terreno firme. «El primer equipo hubo que hacerlo entero y cambiar el modelo de juego e imprimir un carácter. No ha arrancado lo bien que todo el mundo queríamos que empezara. Cuando la ola es buena es más fácil darle la oportunidad a un futbolista joven. Estoy convencido de que Munúa, viniendo de un filial, siempre tiene en mente ayudar a la cantera, pero primero es el jugador el que tiene que ganarse esa oportunidad», relata el preparador del Cartagena B.

Insiste en que tarde o temprano los frutos de la cantera deben llegar al primer equipo, porque se han sentado unas bases sólidas. «Estoy convencido de que en muy poco tiempo algún jugador va a romper esa puerta y estará llamando con fuerza, para intentar tener un poco de protagonismo en el primer equipo. Es un buen día mañana -hoy para el lector- para comprobarlo en la final de la Copa Federación. A ver qué tal les sienta jugar en el estadio que quieren que sea suyo. A ver cómo responden y si están hechos para jugar en este equipo».

Es más, el propio Lillo añadía que para él está claro que mejorar temporada a temporada es fundamental, pero no importa tanto eso como la capacidad que tenga el Cartagena B de salir preparado para jugar en el primer equipo. «Pese a mi ambición o probablemente por ella, firmo ahora mismo antes que un futbolista debute en el primer equipo y tenga continuidad que mi equipo quede muy arriba, porque defiendo que el objetivo de la cantera es hacer futbolistas».

Incidía Juan Lillo en que el proyecto que él lidera es el eslabón entre las bases y el primer equipo. «Se está trabajando a destajo y muy bien. Lo hacemos con más problemas que otras canteras, ya que estamos creando una nueva desde cero. El año pasado fuimos el mejor equipo filial de la Región. Hemos sacado futbolistas que el año pasado estaban en juveniles y tenemos jugadores: Mauro, Mariano, Fran, Tote, Ismael, Mario, Damián, que han intervenido con asiduidad con la primera plantilla. En cualquier momento si alguno de ellos sube, será un triunfo nuestro por el trabajo de estos años».

Reconocía que aunque en la primera plantilla no hay cartageneros tras la marcha de Sergio Jiménez esta situación anómala es «algo circunstancial. Estoy convencido que llegarán. Nos están pidiendo que se incorpore gente de Cartagena a nuestro proyecto. Nuestro trabajo, el mío, el de Paco Sánchez, como director deportivo, y toda la gente que forma parte del cuerpo técnico y de las bases tenemos la obsesión de hacer futbolistas que puedan jugar en el primer equipo y lo estamos intentando, aunque reitero que es complicadísimo».

Los ejemplos saltan a la vista

La marcha de Sergio Jiménez esta última temporada ha dejado la primera plantilla del FC Cartagena huérfana de futbolistas de la ciudad. Hace dos campañas el equipo contaba con Sergio, Verdú y Arturo, pero todos se marcharon ante la falta de continuidad o los problemas para renovar.

A eso hay que añadir que en las tres últimas temporadas han sido muy pocos los jugadores de la cantera que han tenido alguna opción de quedarse.

La aportación de José Antonio, Solano, Teddy o Renato fue anecdótica. Solo Adama Fofana tuvo su momento en este periodo, aunque finalmente no ha encontrado tampoco hueco con Monteagudo ni con Munúa.

Esta temporada el jugador costamarfileño ha sido cedido al Inter de Madrid, en la Segunda División B, en busca de los minutos que en el FC Cartagena no ha conseguido tener.

A la búsqueda del segundo título consecutivo

El Cartagena B busca esta noche a partir de las ocho y media su segundo título consecutivo en la Copa Federación. Disputará la final en el estadio Cartagonova ante el Estudiantes Murcia. El equipo entrenado por Lillo llega con el cartel de favorito al partido, aunque a él le cueste reconocerlo. «Los favoritos en las finales para mí no existen. Son partidos distintos. Si en Liga un equipo no va bien, en la Copa puede ser otra cosa. A los chavales les digo que lo que hay que tener ilusión en ganarla. Vamos a huir un poco del cartel de favoritos y también tenemos que ver como encauzamos esa presión de jugar en el estadio Cartagonova».

Dice el preparador del filial que lo que tratarán de hacer es «las cosas con lógica», a la hora de confeccionar la alineación titular de esta noche. «Lo primero que hago siempre es respetar a los que están muy bien en cada momento para que puedan jugar».

La entrada es gratuita para todos los aficionados que asistan al choque.

Las peñas quieren bajar a Málaga

La Federación de Peñas del FC Cartagena ha propuesto viaje a Málaga para todos aquellos seguidores que deseen ver en directo el encuentro que el equipo albinegro deberá disputar este domingo a partir de las 12 del mediodía ante el Malagueño en la ciudad deportiva El Viso de la ciudad andaluza.

El viaje tiene un coste de 20 euros para peñistas, 22 euros para abonados y 25 euros para el resto de aficionados. La entrada no está incluida en el precio del mismo.

El plan del desplazamiento preparado por los peñistas el siguiente: salida a partir de las tres de la madrugada del domingo desde la explanada el estadio Cartagonova y regreso a la finalización del encuentro -llegada aproximadamente a las nueve de la noche del domingo-.

Las inscripciones se pueden efectuar hasta el jueves a las ocho de la tarde y el viernes de nueve a dos en la Terraza Cartagonova.

El encuentro, recordemos, no será emitido por televisión.