En la mente de Gustavo Munúa, la Copa del Rey ya es historia. El entrenador del Cartagena da por cerrado el capítulo en esa competición y pone el foco en conseguir, después de tres jornadas sin ganar, la primera victoria liguera, además en casa, el domingo ante el UCAM Murcia. «Teníamos muchas ganas en la Copa, era muy importante para el club, pero se nos escapó por muy poco y hay que pasar página», dijo el uruguayo, que apunta que «se hizo todo lo posible» para eliminar al Logroñés, pero que «los grandes objetivos de este club son otros». Para acercarse a los puestos de play-off, el Cartagena tiene que empezar por sumar los tres puntos este domingo, ante un rival directo como el conjunto universitario. «Lo primero es encontrar una estabilidad. El equipo está yendo de menos a más», señaló Munúa.

En el lado positivo de la balanza, el Cartagena puede centrarse exclusivamente en una competición, y no desgastar aún más las piernas en estos primeros meses. La acumulación de partidos siempre hace mella, como les ocurrió el año pasado, cuando el club pegó un bajón en los meses de octubre y noviembre.

Del encuentro ante el Logroñés, Munúa rescata que «hubo momentos para nosotros y para ellos», y considera que fue un partido de ida y vuelta. «El Logroñés tiene un juego combinativo, que si no estás atento o no basculas bien, te lo hacen pasar mal. También sabemos que en transiciones le podíamos hacer daño», comentó el uruguayo.

El encuentro, que se fue a los penaltis, fue bastante nivelado aunque la mayoría de ocasiones fueron para el equipo local. «Por momentos estuvimos bien y por momentos un poquito erráticos. Pero es lo normal cuando los dos equipos quieren llevar la iniciativa. Ellos tuvieron errores y no los supimos aprovechar», indicó Gustavo Munúa. El gol desde fuera del área de Rayco igualó el partido, y la tanda de penaltis decantó la eliminatoria del lado del Logroñés, con un penalti fallado por Óscar Ramírez.

Con tantas caras nuevas en la plantilla, el inicio de la competición se está haciendo duro para un Cartagena que empieza a perder demasiada comba en la competición liguera: solo 2 puntos de 9 posibles. «Nos falta una vuelta de tuerca para poder conseguir una victoria, tres puntos. Ojalá sea este domingo. Veo al equipo entregado, lo veo convencido y lo veo rebelde», dijo el uruguayo. Superado el 'stage' de 10 días lejos de la ciudad portuaria, Munúa insiste en que el equipo está muy mentalizado y muy fuerte para superar este bache inicial. «No tengo ninguna duda de mis futbolistas. Los rivales también juegan, pero nosotros tenemos cosas para mejorar», añadió.

De cara al duelo de mañana, Munúa lo encara, como cada domingo, «con la mentalidad de conseguir los tres puntos», y se suma a la filosofía de «ir partido a partido». «Tenemos un gran respeto por los rivales. El UCAM es un rival muy duro, muy bueno, y seguramente no va a ser fácil, pero considero que nuestro equipo está muy competitivo para hacer un gran partido», añadió.

Peligro del UCAM a la contra

El vigente campeón del grupo IV se medirá a un equipo universitario que el año pasado se quedó fuera del play-off, pero que sigue confiando en el cántabro Pedro Munitis como técnico. Han comenzado algo mejor el curso, con dos victorias en tres partidos, pero sufren una terrible plaga de lesiones. Además, el miércoles fueron eliminados de la Copa del Rey por el Racing de Santander. «Ellos también tienen unas cuantas bajas. A ver qué equipo pueden llegar a formar. Los conocemos muy bien, tenemos que llevar cuidado con las contras», apuntó el uruguayo.

En los albinegros, también hay bajas. Aparte de las lesiones, Pedro Orfila está sancionado por la roja que vio el domingo en el Nuevo Colombino. «Es una baja importante, pero hay compañeros que lo pueden suplir», comentó Munúa. Previsiblemente, Moisés y Sergio Ayala formarán la pareja de centrales.